jueves, 5 de julio de 2007

pudiera ser


PUDIERA SER

Pudiera ser que todo lo que en verso he sentido
no fuera más que aquello que nunca pudo ser,
no fuera más que algo vedado y reprimido
de familia en familia, de mujer en mujer.
Dicen que en los solares de mi gente, medido
estaba todo aquello que se debía hacer...
Dicen que silenciosas las mujeres han sido
de mi casa materna... Ah, bien pudiera ser...
A veces en mi madre apuntaron antojos
de liberarse, pero, se le subió a los ojos
una honda amargura, y en la sombra lloró.
Y todo esto mordiente, vencido, mutilado,
todo esto que se hallaba en su alma encerrado,
pienso que sin quererlo lo he libertado yo.

ALFONSINA STORNI.

Idola, mujer de libertades, de revolución poética, loba y cordero, con final de sirena.

lunes, 25 de junio de 2007

Thinking Awards


Extraído de Lunita querida:

Por ahí anda dando vueltas una (de)nominación de la que Lo Feo forma parte, para mi sorpresa. Y como viene de la mano de un amigo me engancho para ver hasta dónde llegamos.
Estas son las bases:
1. Sólo si eres uno de los premiados, escribe un post con cinco links de blogs que te hacen pensar.
2. Link a este post; de esta manera se podrá encontrar el origen exacto de este premio de enlace. (Nota de Lo Feo. Acá entiendo que debo linkear a quien (de)nominó este blog, no? o es a este?)
3. Opcional: Muestra con orgullo el “Thinking Blogger Award” con un link al post que tú escribiste.

Ahora Eleonorita.

A ver si me sale, no crea que me doy mucha maña con eso de enlazar, linkear, y bloguear, ahora sí lo que me sale mejor es retar, pegar gritos del tipo : te voy a matar, patadas en el culete son una especialidad de las mías. Pero presentado el desafío no me hago la gila (tonta)
Y los nominados son:( me falta un actor famoso para presentarlos), pero bue salteado el escollo, allá vamos.
1--Luna Luna me marca un camino, me siento culpable por no venir más seguido, porque me da placer. Cuando estoy acá siempre es para regocijo, y devuelvo la gentileza de la solidaridad femenina.
2-SergioEs una novedad y una envidia, escribe y publica, una admiración. Gente sin estereotipo como me gusta a mí.Me queda pendiente matar a una gorda con él.
3-Kill
Walter, aunque triste es un placer leerlo. Me encanta visitarlo,es tierno, es melancólico, es beautiful.
4- Living Un deprimido que se olvida de serlo por momentos.
5-Pal Pal es mucho.

No se si entendí, pero viejo se hace lo que se puede. Y me quedaron un montón

sábado, 23 de junio de 2007

PeRtUrBaDa



Perturbada, me dejaste al pasar

sin saber que es halago,

Perturbada me leíste, y yo reí.

Perturbada me reconozco,

Perturbada me sé.

Lo que me turba,

me hace crecer

Perturbada nací

Perturbada moriré...


Dedicado al ser que me dejo inspirador comentario anónimo.

Cinema Paradiso


Son aquellos pequeños placeres que uno goza cada vez que acude,recurre, o simplemente los desempolva y nos permite volar con ellos. Exaltación de pequeñas cosas, humildes, pero que pegan directo al corazón. Me quedo con esa maravillosa última parte , la recopilación de besos.

jueves, 21 de junio de 2007

la curva


Que devenir insoportable de la mujer, siempre corriendo para que no escape la curva.

Nos empeñamos en una loca carrera por tener las curvas de oro, luego la curva de la felicidad que no sería otra que tener marido, y luego para que no decline la curva de la fertilidad. Llegar a los 40 sin hijos nos hace sentir, que se nos bondea la curva...la curva de la fertilidad. Y despues que será ?Seguro la curva de la realización personal y el éxito laboral. Podremos algún día dejar de correr en pos de pertenecer? Ya sé ,"Pertenecer tiene sus privilegios", aseguran expertos de marketting de Mastercard o American Express, la put...

jueves, 7 de junio de 2007

Desde tiempos inmemoriales o sea desde que nací, ...


Desde tiempos inmemoriales o sea desde que nací, tengo la virtud o el defecto de contestarle a todo. Me titulaba mi padre: Zapata, sino la gana la empata. Y desde chiquita que cuando me tocaban contestaba tocando, como la mancha pero sin correr, pero cerquita, y se supone que el último gana, o al final de cuentas demuestra que es el más perseverante. Me sumía en ese juego cuyo emulo sería el de la buena pipa. Y a mi me encantaba porque siempre ganaba por cansancio. Es más mi papá se hacía el distraído como si no jugara y me tocaba el brazo, porque siempre era ahí , y yo me moría de risa de descubrir que todavía jugaba a pesar de que se hacía el que no. Bueno como siempre me fui a visitar los kinotos, y vuelvo a la idea principal me exigiría mi maestra de lengua. Ese juego que recuerdo de mi tierna infancia, se ve que se apropio de mi lengua. Y como ya nadie juega a tocarme el brazo, ejercito con la lengua mordaz. Es una necesidad imperiosa : contestar todo, a veces sin pensar, a veces hiriendo, a veces con saña, pero jamás con amor. Siempre el retruco, el vale cuatro, pero una vez que lo tengo en la cresta de mi lengua nada lo puede detener, se eyecta hacia el aire, dejando a un confrontador casi ...mudo, desamparado, de semejante contraataque.
Ojalá que llegue el día que no desee jugar más, a quién es el último que hiere, a sacudir el corazón del otro de una trompada con una lengua látigo.
Ojalá llegue el día que aprenda que, jugar a veces puede lastimar.

viernes, 1 de junio de 2007

feliz cumple yo


Se acerca Junio, mes de festejos por acá. Pero lo empiezo con melancolía, primero porque el 4 es mi cumple, y siempre me deprimo los 4 de junio, siempre me regalo un poco de melancolía, de sueños interrumpidos, de logros no alcanzados, de expectativas que se truncaron, de querer que ese día se pare el mundo ...carajo...que es MI cumple!!! y la gente pasa a a mi lado y no se da cuenta que es el aniversario de mi nacimiento. Además quisiera que todos festejaran que se hiciera extensivo, tipo fecha patria...pido mucho? Y no Dios no me manda ni un fin del mundo, ni un cometa, ni ningún fenómeno meteorológico que estuviera dedicado a mi persona, nadie me hace una fiesta sopresa con 1500 personas que no conozco, pero que yo igual fuera la anfitriona, total en las fiestas nadie se conoce, y todos andan por ahi pululando sin complejos. Ni el presidente sale por cadena nacional, a desearme un feliz cumple, bueno todas estas cosas simples, son las que me hacen replantear que hice yo con mi vida, que todo esto no sucede. Por eso el 4 de junio me regalo tristeza, por todo lo que no fui, ni seré.
También a quien se le ocurre como regalo de cumpleaños, estar rodeada de hijos que me aman, que me colman de besos, y que quieren que ese día sea especial para su mamá...a quien se le ocurre?.

martes, 29 de mayo de 2007

Dia de mierda...de A.R.T


Todo comenzó con una entrega, llamado a la mañana con el reclamo correspondiente seguido de la pregunta: cuando entregás? mira que la fecha que te dimos venció el 24, y Pichuruli ( no daré nombres por razones ocvias, como dice la Gabu)te extendío pero hace frío (evidente acotación)...ya, ya entregó respondí alegremente, contenta de que 100 empleados no se caguen de frío. Pero ella que se ve que anoche tuvo una mala noche, o pasó mucho frío en esa cama, o se destapó y eso complicó el día subsiguiente, insistió: Tenés A.R.T?...QUE!!! exclamé Yo horrorizada. y ella continúo en prosa: Si para entrar a la empresa, tenés que tener A.R.T, ...pero Que!!! vos no tenés A.R.T?.
Yo para esto había enmudecido, y pense bajito: y...no flaca no tengo ART, si en mi empresa somos dos, mi Favio y yo, no escuchaste nunca del recorte de gastos? Pero por razones ocbias le dije: no (chiquito), razón por la cual ella suspiró exarcebada pensando esta gente del tercer mundo (pero ella mas criolla que yo). Bue hasta ahí simple incidente, acordamos entregar en el portón recuerden no puedo acceder al playón. Entregó con las condiciones acordadas por ellos, o sea le revoleo las bolsas ...pasa media hora y recibo llamada de la mal cogida..(.ehhhhh no eleonora chstttttt eso no se dice...mal educada). Y con regodeo me dice, tenés que retirar todos los buzos polares, porque uno de los bordados está 1 cm mas grande que las medidas que nosotros te pasamos...( mutis por el foro)silencio del otro lado de la línea, o sea de mi lado, y se me escapa un GUTURAL : QUEEEEEEEEEEEEEEEE!!!!!!!!!!!!!!! Si exclama ella, estás no son las condicones acordadas, asi que vení y solucionalo,( aclaro que nos separan 40 km).Y continúa: y arregla lo de la ART porque los de Seguridad no te van a dejar entrar más...
Si amigo bloggero, por supuesto que salté como Violeta !!! Pero nada...me hicieron un cuatro a cero. Los buzos se retiran, las camperas debo descoserlas, pero ojo QUE CON LA ART LA MANDE A LA ...DE SU MADRE...BUAAAAAAA... mientras insistía ella tozudamente : la A.R.T, la A.R.T!!! como un canto fúnebre...

sábado, 26 de mayo de 2007

Casita con Techo


Los años pasan y vienen con otros matices, ya nada me parece tan blanco ni tan negro. Mis opiniones y creencias fervientes se han desmaterializado un poco. Mis pasiones se van moderando, y puedo convivir sin extremos. Lo que dije : esto jamás, no me parece tan jamás, tengo un ojo más compasivo con el prójimo( excepto con la boluda de la ART), y toda la furia, fuego, hoguera de mis creencias, ya crepita en una chimenea y da calor a una Eleonora no tan extrema.
Tal vez estaría asociado con la juventud ese fervor en y a la vida, esa lucha por los ideales, ese creer que en el combate estaba la llave de la vida misma. Hoy estoy más otoño, y hasta este invierno me parece agresivo, y poco concordante conmigo. Tengo ganas de rajarle a las locuras, y postrarme en un abrazo abrigado...hoy busco calor y menos aventura. Refugio del precipicio. Abismo cambio, por casita con techo.

novia, esposa, pareja...no me da lo mismo.


Salimos a deambular, con mi pareja, novio, marido...y acá hago un parate...porqué será que cada vez que tengo que titular mi relación con Favio, el título o el sitial de honor para describir su puesto me suena esquivo? y pienso en las razones, novio no da, ya estoy vieja para andar noviando, además de tener un hijo con él y convivir hace dos años,pero por otro lado suena a infinitamente más romántico, y da la sensación de dos tortólos todavía en la etapa rosa. Pero igual me queda chico ser la novia de alguien, madre de 6 hijos y todavia jugando a la novia, da para pensar, pero esta pelotuda no se da cuenta que es madre... y Madre suena grande, suena que te debes a...toda la prole, no hay espacios personales, es el deber ser. Después intento acomadarme en el término marido, pero mi estúpida conciencia, reza Eleonora no mientas no estás casada...y respondo Verdad.Y cada vez que se me escapa , te presentó : Mi Marido...por dentro me sonrojo, porque no es verdad, es más siento que le estoy robando algo a alguien. A mí no se me ocurriría presentarme como doctora por la sencilla razón de que no lo soy, entonces con Marido me pasa lo mismo, me siento ladrona de títulos...Y despues viene Pareja, tan de moda en estas épocas, estamos todos emparejados, pero me suena a a recauchute de la vida, es como si bue otra no me queda no soy novia, no soy esposa, soy la pareja.Pero en realidad no estoy nada pareja con él, al contrario estamos desparejos, porque no coincidimos en nada, pero igual nos elegimos, eso será un empate?. Por eso lo de parejo tendrá que ver con horizontes? Todo esto pienso cada vez que tengo que titular a Favio. Y me vuelven las revelaciones sobre los términos, pareja me suena a... y asi sigo con las disqusiciones sin siquiera saber donde me coloco.
Entonces mejor sigo así, ayer salimos con Favio...

Excelente no se lo pierdan!!!


Durante 10 días, el ciclo ofrecerá más de 70 conciertos, seminarios, mesas redondas, clínicas, una feria y una muestra fotográfica. Con entrada libre y gratuita, habrá shows de martes a viernes de 16 a 23 y sábados y domingos de 14 a 23. La apertura, que tendrá lugar el 17 de mayo a las 19, estará a cargo de Mariano Otero Orquesta y posteriormente, a las 20.30, estará Immigrasons (Cataluña-Argentina), que presentará su CD. El cierre será el 27, con Chucho Valdes Cuarteto, a las 21.30.

Este ciclo se propone reunir y mostrar todas las tendencias del jazz y otras músicas relacionadas con este género. Esta sexta edición verá enriquecida su propuesta por la participación de destacados artistas del exterior y la participación de grupos y solistas de las más variadas tendencias del jazz local. El Dorrego es un espacio de 7500 metros cuadrados que contará con 3 escenarios, con capacidad para 1.500, 1.200 y 600 personas sentadas.

De esta edición participarán, entre otros: Anthony Braxton Trío (EEUU) / Kenny Barron Trío (EEUU) / Chucho Valdés cuarteto (Cuba) / César Camargo Mariano (Brasil) / Antonio Arnedo-Ernesto Jodos (Colombia-Argentina) / Immigrasons (Cataluña-Argentina) / Dino Saluzzi (Argentina) / Hnos. Fattoruso con Daniel Maza (Uruguay) / Juárez-Moreira (Brasil) / Trío Curupirá (Brasil)

También lo harán: Antigua Jazz Band / Swing Timers / Oscar Serrano Orquesta / Escalandrum / Mono Fontana / Orquesta Filarmónica de Buenos Aires / Ramiro Gallo Quinteto y Santa Fe jazz ensamble/ Jorge Cutello / Fernando Tarrés / Luis Nacht / Manolo Juárez-Daniel Homer / Delfina Oliver / Guriza / Alejandra Martín / Santiago Giacobbe / Roxana Amed / Trío Nolé-Herrera-Lapouble / Zo’loka / Marcos French / Livia Barbosa /

Programación en: www.musicaba.buenosaires.gov.ar

jueves, 24 de mayo de 2007

caminante no hay camino .


los caminos de la vida no son lo que yo esperaba, cantaba Vicentico..creo que el, lo cantaba, soy horrible adjudicando letras a sus autores. Pero bue, es lo hay, soy yo quien maneja los caminos. Y a veces me veo desde arriba, estoy en el recodo de un camino se abren dos laterales. Un camino es luminoso, llano, pocos árboles,mucho sol. En el otro también hay sol, pero hay mucho barro, pozos, malezas, arbustos espinosos...a que no saben cual tomo? Obvio...ya me conocen...

Eleo

miércoles, 23 de mayo de 2007

tu paz, mi paz


tus locuras, mi intento de estabilidad.
tu impaciencia, mi perseverancia.

tu enojo, mi pocas ganas de participar.

tu enganche, y el mio...

mi odio y el tuyo...

no tiene paz.


no tiene paz...

lunes, 21 de mayo de 2007

como llego cuatro estaciones


Las cuatro estaciones, es un cuento que llegó a mis manos, de manera poco convencional. Empecé a leerlo y no pude parar, me encantó la intrincada y elaborada relación de estos dos personajes, me sentí identificada con Beatriz, con su parte rebelde y alocada, sumisa y contradictoria, demandante, posesiva, generosa y miserable. Beatriz compré. Y acá están las miserias de ellos dos...

LAS CUATRO ESTACIONES




DEDICATORIA
a la revolución romántica
a María Rosa, Edmundo, Abelardo, Betina
a la revolución inocente
a Fidel, Camilo, Che, Pepe
a los estudiantes revolucionarios
a Ingrid, José, Rebeca, Hugo
a los administradores aficionados
a Mario, Calvert, María Elena, Fernando
a los soldados que cantan
y los cantores que custodian
a Portocarrero, Milian, Jorge, Chiqui
a el mar junto a mi ventana, la Sierra Maestra
la playa de Varadero y el peso que no vale un dólar
a Asenneh, Enky, Rine, Candela
a el glorioso zafarrancho que habéis creado para los niños
que leen y los camareros que aprenden
a Haydée Santamaría, Miriam, Pablo, Teresa
no por razón de los gritos de combate en que pronto nadie
creerá
sino porque habéis convertido los cuarteles en escuelas
no por razón de los traidores que habéis matado al compás
quejumbroso de palabras indignadas
sino en virtud de la simiente de perdón que sé que poseéis
no porque hayáis de ganar si sobreviene la lucha grande
sino porque no os amedrenta la idea de que podáis perder

a Cuba


PARTE PRIMERA
INVIERNO

UNA CASA DESIERTA, EN LA CUAL ENTRAN DOS JÓVENES, TRAYENDO CONSIGO SUS POSESIONES. IMPERA UNA MEZCLA DE MUEBLES Y OBJETOS ANTIGUOS QUE, DE POSEER ALGUNA BELLEZA, DEBE SER LA QUE ACOMPAÑA A TODO LO OLVIDADO Y TRISTE, Y ADEMÁS OTROS MUEBLES SENCILLOS ARMADOS QUIZÁS A MANO. SON LAS ÚLTIMAS HORAS DE UNA TARDE. EL JOVEN SE LLAMA ADAN, Y ELLA, BEATRIZ. SUS EDADES PODRÍAN OSCILAR ENTRE LOS 30 Y 35 AÑOS.

ADAN: Aquí estamos seguros. No vive nadie. Bueno, bueno...No crees que ningún lugar sea seguro, verdad? Yo pasaba por aquí todas las mañanas, hasta que un día no pude resistir la tentación y entré. Sabe Dios quién habrá sido el dueño de una casa así, que luego la abandonó! No vas a decir siquiera que te gusta? Dí: “me gusta”. Sólo esas dos palabras. O “no me gusta”. O “vámonos”. O lanza un hondo suspiro, o sonríe. Tampoco te sientas? Lo harás si te traigo una silla, si? Presiento que no harás nada que yo no te prepare. Bueno, entonces durante las primeras semanas te lo prepararé todo. Yo haré la comida y la cama, te calentaré. Sólo durante las primeras semanas. Ni siquiera vas a decir esas dos palabras? Haz la prueba, por favor. Di “Me...(ESPERA)...gusta” (ESPERA). ELLA NO RESPONDE. Siéntate entonces. CORRE UNA SILLA, LE QUITA EL POLVO Y SUAVEMENTE LA CORRE PARA QUE ELLA SE SIENTE. Escucha ese viento. Tienes frío? Deberé poner un cristal nuevo en esa ventana mañana o en otro momento. Hace frío. BUSCA EN TORNO UN OBJETO QUE EMBUTIR EN EL MARCO VACIO. UN TROZO DE ARPILLERA VIEJA LE VIENE BIEN. LUEGO REVUELVE EL CONTENIDO DE SU VALIJA Y SACA DOS MANTAS. Toma. Para calentarte. Lo primero es estar calientes. Siempre. LE PONE UNA EN LAS PIERNAS. Inválida. Eres inválida, verdad? También eres hermosa. BEATRIZ CIERRA LOS OJOS Y DUERME. ADAN LA OBSERVA UN TIEMPO LARGO. LEVANTA UNA MANO Y ESTÁ POR TOCARLE EL ROSTRO. No, no voy a tocarte. Lo creerás? Algo tienes que creer. Por que será que los rostros tristes son siempre tan hermosos? Duerme, no te tocaré. Una cara tan preciosa! Una cara que yo podría amar! Aún volver a “amar”. Pero no lo haré, bella dama. Pasar por todo eso de nuevo, no. Amar nuevamente, no. Te daré calor humano, pero no amor humano. Otra vez eso, no. Otra vez esa sucesión familiar de traiciones, de reproches, no. Conoces todo eso, verdad? En tu sueño, en las arrugas que circundan tus ojos, adivino que lo conoces. Que dirías si ahora mismo estuvieses despierta? Me preguntarías si tengo miedo, miedo de amar? Yo contestaría: “Sí, tengo miedo de amar”. Te burlarías de mí gentilmente y me llamarías cobarde. Dirías: “Los que tienen miedo de morir, mueren mil veces”. Yo entonces tendría la sensación de ser un tonto y de ser mezquino por contenerme, y daría de mí. Daría, daría y daría porque todas las partes de mi ser ansían dar. No, de nuevo no. Todo eso otra vez, no. BEATRIZ SE DESPIERTA SOBRESALTADA. Pesadillas? Buscaré leña para hacer fuego. CAMINA, LUEGO SE VUELVE. No dirás esas dos palabras, dos tan solo? BEATRIZ PERMANECE EN SILENCIO. EL PARTE PARA BUSCAR ALGO QUE ARDA. ELLA SIGUE MIRANDOLO MIENTRAS ADAN VA DE CAMINO A LA PUERTA, Y LUEGO QUE LA HA TRASPUESTO CONTINUA CON LA VISTA FIJA EN ESA DIRECCION UN RATO LARGO. POCO DESPUES VUELVE LA CABEZA DE NUEVO HACIA ADENTRO, PARA MIRAR EL CUARTO, CUYA TRISTEZA, DESOLACION Y FRIO PESAN SOBRE SU ESPIRITU. LLORA. LA MANTA CAE AL SUELO; BEATRIZ ENTONCES, DESLIZANDOSE EN LA SILLA HACIA ABAJO, SE PONE DE RODILLAS, Y APRIETA LA FRAZADA CONTRA SI. VUELVE ADAN, QUIEN SE QUEDA JUNTO A LA PUERTA SIN AVANZAR HACIA BEATRIZ. Levántate, Beatriz. Levántate. Beatriz! Beatriz! SIGUE CANTURREANDO EL NOMBRE O LLAMANDOLA EN VOZ ALTA, MAS BIEN; INSISTENTE, CON SUAVIDAD, DICE: “Beatriz! Beatriz! Beatriz!” HASTA QUE ELLA, DESPACIO, VUELVE A LA SILLA. ADAN VA AL SITIO EN QUE ESTA LA MANTA, LA LEVANTA Y LA PONE SOBRE LAS PIERNAS DE ELLA. “Que prisa tienes por llegar al reino de los muertos? Que buscas allí?” Conoces esos versos? Son de Shelley. “Que prisa tienes por llegar al reino de los muertos? Que buscas allí?”. AHORA ADAN PREPARA LA LEÑA PARA EL FUEGO Y LO ENCIENDE. Sabes que casi no conozco el sonido de tu voz? Es aguda o chillona? Dulce? De contralto? Débil? Sentado en ómnibus o trenes, acostumbraba contemplar las mujeres bonitas; a veces sonreían y yo correspondía con otra sonrisa y trataba de adivinar en los rostros todas sus virtudes: mansedumbre, comprensión, pasión. Ellas entonces hablaban y se derrumbaba cuanto había imaginado acerca de ellas. Yo me pregunto: como es posible que ojos hermosos tengan voces feas? Es que tienes tu alma en tus labios o en tus ojos? No sé. Lo sabes tú? Contéstamelo. Eso nada más. Sólo eso. Di “ojos” o “labios”. O señala. Haz eso siquiera. Señala nada más. Ni eso tampoco? Oye como chisporrotea la leña. Hueles? ELLA ASPIRA AIRE DESPACIO, LIGERAMENTE. Otra vez. Puedes volver a hacerlo? BEATRIZ VUELVE LA CABEZA HACIA OTRO LADO; A CAUSA DE SU TONTA PERSISTENCIA, DE MOMENTO HACE CASO OMISO DE ÉL. ADAN NO LOGRA ENTENDER NADA. Crees que no entiendo, no es cierto? Como reconozco esa expresión! La hembra que rechaza al macho. Leo en tus ojos: no hay voluntad, no hay deseo de hablar, no hay deseo de andar, de obrar. Lo veo. No lo adivinas? Presumes que iba a traerte aquí, a entregarte un año entero de mi vida si no comprendiese nada? Lo piensas? Sin embargo, es una tontería que lo pregunte. Perdóname. Mira, hasta el gas está encendido. EL HA ENCENDIDO UNA ESTUFA. No es milagroso? CAMINA Y SALE DE LA VISTA. Y también el agua. SONIDO DE AGUA; VUELVE. Tenemos fuego y agua. RECOGE LA OTRA MANTA Y VA A UNA SILLA, EN LA CUAL SE SIENTA. SE TAPA LAS PIERNAS, COMO ELLA, Y LA MIRA FIJAMENTE. No es milagroso? SIGUE UNA PAUSA LARGA. AMBOS CONTINÚAN SENTADOS. PASAN DIAS, Y AUN SEMANAS.ADAN SE LEVANTA BRUSCAMENTE DE SU SILLA Y TIRA AL SUELO LA MANTA. ES DE MAÑANA.Ya veo bien que la delicadeza no sirve de nada. Lo único que produce es más autocompasión, no es verdad? AHORA SE DEDICA A PONER EL CUARTO EN ORDEN, LIMPIANDO POLVO Y TELARAÑAS. Mírate. Podrías afirmar que eres unas mujer? La cara se te está cayendo a jirones a causa de tu autocompasión. No me impresiona tu silencio. Yo podría hacer eso mismo que tú estás haciendo, permanecer sentado ahí mudo, cazurro, inerte. Podría hacerlo. Hasta disfrutas con eso, verdad? Cuán bello es el sufrimiento! Tienes todo el mundo en contra, no? Eh? Todo el mundo es tonto y tú estás sola y sufres. BURLON. “Estoy sola. Nací sola. Todos estamos solos, todos nacemos solos”. Divino! Espléndido! Muy halagüeño Sufrimiento. Bello, bello sufrimiento! Más con todo, sé. Por que me tengo que burlar de ti? Lo sé. También he amado y he sido amado. Pero aniquilé ese amor. Que necesidad tengo de reírme de ti? Hiciste muy bien en rechazarme, en realidad no nos conocemos. Aun cuando te miro y me veo a mí mismo y procuro adivinar no sé. Pobre chica! Sentimos pesadumbre por nosotros mismos, no es así? Pero mira, yo vivo! Sigo. Sigo, Beatriz. No me crees, verdad? No me crees. ESCRIBE SOBRE EL POLVO DEPOSITADO SOBRE UN MUEBLE. No me cree. HACE COMO SI LA PREGUNTA QUE SIGUE FUESE DICHA POR ALGUIEN QUE ESTA LEJOS Y LA ESCUCHA LLEVANDOSE LAS MANOS A LOS OIDOS. Eh? Como es eso? Por que no me cree? Por que? REPLICA GRITANDO. PORQUE NUNCA TE RECUPERAS, NUNCA. Por eso. Por que no nos recuperamos jamás, Beatriz? Ni aun a eso responderás? Ni aun a eso responderá. Pobre Beatriz! Lo digo en serio: pobre, pobre Beatriz! Pobre Adán! SE DIRIGE A LA VENTANA, Y RECORRE CON LA VISTA EL EXTERIOR INHOSPITO SIN PRESTAR ATENCION A NADA. Beatriz, de que color es el viento? Quizás debamos esperar que pase el invierno. ESTAN VIVIENDO CADA UNO EN SU PROPIO INFIERNO. TRANSCURREN DIAS Y AUN SEMANAS. ADAN LE CANTA. ES UN ANOCHECER.
“Sopló el viento en la noche, alma mía,
y unas gotas de lluvia cayeron.
Solo tuve un amor verdadero
y hoy descansa en su tumba muy fría”.

“Por mi amor haré todo lo que
cualquier otro en mi caso haría;
Donde yace sin vida estaré
con mi llanto un año y un día”.

RECITA LO QUE SIGUE.
“Allá en aquel jardín florido
los dos solíamos pasear.
La flor mas bella que ha existido
marchita para siempre está”.

“Su tallo, amor, ya se ha secado
y el corazón también perecerá.
Procura ser feliz, mi bien amado,
que la muerte en su día volverá”.

Has visto? Hasta yo me vuelvo morboso. Si permanecemos juntos muchos meses más, crees que nosotros también nos desintegraremos? Que nos desharemos bajo el peso de la desgracia? Que nos consumiremos? Oye, si permanezco aquí de pie, junto a la ventana, y tú sigue ahí sentada, un día tras otro, absolutamente inmóvil, crees que Dios se apiadará de nosotros y nos convertirá en piedra por los siglos de los siglos? Hagamos la prueba. Tú, ahí; yo, aquí. Absolutamente inmóviles. No te muevas. PERMANECEN UN LARGO RATO, MUY LARGO. LUEGO: Has conocido alguna vez un Dios tan poco servicial como el nuestro? BEATRIZ SONRIE. ADAN SE CORRE RAPIDAMENTE A UN SITIO EN QUE PUEDA MIRARLA DE FRENTE. Has sonreído. Te he sorprendido sonriendo, no lo niegues. No es verdad que te he sorprendido? Eso merece un obsequio. Hoy tendrás de mi parte algo especial. ADAN VA RAPIDAMENTE A SU VALIJA Y EXTRAE UN CEPILLO DE CABEZA. LUEGO SE COLOCA DETRAS DE BEATRIZ Y LE QUITA LAS HORQUILLAS, CON LO CUAL POR SU ESPALDA CAE SU HERMOSA CABELLERA. LE PASA DULCEMENTE EL CEPILLO POR EL CABELLO. Ves lo que ofrecemos a las personas que deseamos confortar?Los gestos comprobados del amor. Las cosas que sabemos que antes procuraron placer a otros. Te ofende? Pero que alternativa existe? La inmovilidad? El silencio? Yo permanecía callado porque me parecía que todos mis pensamientos debían ser reservados para una única persona. Que los conociesen más de una persona era traicionar su condición de secreto. Así me parecía. Sabes una cosa? Fue mi silencio, más que nada, lo que hizo que mi vida fuese miserable. Más que cualquier otra cosa. Pero que podía yo decir? Que podía decirle a ella? Toda mi pasión fue reclamada, destinada a otro lugar. Pero ella tuvo su gloria, su retribución...Ella, mi esposa. Un día vino de otro país un joven destinado a ser huésped nuestro. Tenía los ojos de un niño inseguro en un cuarto extraño y festivo y reía con hondo placer de todo cuanto veía. No podías enseñarle nada ni llevarlo a ningún lugar que no encontrase deleite. Y paulatinamente vi que mi esposa se zafaba de su tristeza al poner en juego su corazón y sus sentidos para transportarlo de un lugar a otro. En arcanos rincones de nuestro pasado se reveló ante él. El la tomó de la mano y bendijo su bondad al tiempo en que cruzaban y pasaban por puentes, contemplaban el río y comían en cordiales restaurantes, los gestos comprobados del amor. Durante dos semanas ella se trasformó hasta alcanzar la magnitud que antes tuvo y abandonó a sus hijos, su hogar y mi infidelidad. Por onza, su pasión resurgió, con un destino nuevo. Acostado en las primeras horas del día, esperando su regreso, sin tener nadie a mi lado, imaginando su ternura y sus pasiones que ellos ahora compartían, precisamente entonces, en aquel mismo instante, apretaba los dientes y clamaba pidiendo “justicia” para mi. Justicia, justicia, justicia! Que conozcan los secretos más de una persona es traicionarlo. Pero quién guarda silencio eternamente? Y ahora, porque no tengo esposa ni amante te canto a ti, te recito poesías y te cepillo el pelo. Soy sincero por lo menos. O es que la visión de un hombre honesto es un espectáculo patético? Así creen casi todas las mujeres, no es verdad? Tienes el cabello precioso. Que hermoso tomar en tus manos un cabello de mujer y poder decir!: “Beatriz, tienes un cabello precioso”. SE DESPLAZA AL SITIO EN QUE PUEDA ARRODILLARSE FRENTE A ELLA. Beatriz, tienes manos preciosas. Beatriz, tienes ojos, labios y piel hermosos. Me perdonas por decirlo? No sabes lo que significa poder decir estas cosas a una mujer. Sabes tan sólo que una mujer necesita oírlas, pero desconoces el dolor que crece en el interior de un hombre que enmudece de pronto y no tiene nadie a quien decirlas. Eso no lo sabes, verdad? No, no te tocaré, pero, me permitirías que te mire? Sería capaz de llorar cuando te miro. Pero en ese caso...serían tan solo lágrimas por mí. Crees que el invierno pasará algunas vez? POSA SU CABEZA EN EL REGAZO DE ELLA, FATIGADO. SE LE CIERRAN LOS OJOS Y SU RESPIRACION SE TORNA DIFICULTOSA. ELLA LO CONTEMPLA ALGUNOS SEGUNDOS Y LUEGO LEVANTA LA MANO DESPACIO, LLEVANDOLA A LA CABEZA DE ADAN. LE HA COSTADO TRABAJO HACER ESTO Y DESPUES DEL ESFUERZO SU CUERPO REPOSA. TAMBIEN ELLA
CIERRA LOS OJOS. PASA LA NOCHE, PASAN LOS DIAS, HASTA LAS SEMANAS. Y FINALMENTE...

Primavera. las cuatro estaciones

PENETRA EN EL CUARTO Y LO RECORRE DE LADO A LADO UN RAYO LARGO DE LUZ DE SOL. ES DE MAÑANA. BEATRIZ ABRE LOS OJOS. AL PRINCIPIO ESTA SORPRENDIDA Y LUEGO COMPRENDE DONDE SE ENCUENTRA. MUY SUAVEMENTE LEVANTA LA CABEZA DE ADAN, PONE SU MANTA EN FORMA QUE LE SIRVA A EL DE ALMOHADA DONDE ESTABA EL REGAZO DE ELLA, CORRE A UN LADO LA SILLA Y SALE DE LA CASA. DURANTE LA AUSENCIA DE BEATRIZ, AUMENTA LA INTENSIDAD DE LA LUZ SOLAR Y EL CUARTO ES TESTIGO DEL INVIERNO QUE PASA. PRONTO REGRESA ELLA, TRAYENDO EN SUS MANOS UN RAMO GRANDE DE CAMPANILLAS. COLOCA ESTAS ENCIMA DE ADAN, QUE SIGUE DORMIDO, HASTA ADORNARLO DE LA CABEZA A LOS PIES, Y EN EL INSTANTE EN QUE PONE LA ULTIMA FLOR, ADAN SE DESPIERTA.
ADAN: Nadie me había hecho algo tan bello desde...
BEATRIZ: Ves lo que ofrecemos a las personas que deseamos confortar? Los gestos comprobados del amor.
ADAN: Adornabas con campanillas a tu amante?
BEATRIZ: Todas las mañanas.
ADAN: Y de noche?
BEATRIZ: Untaba mi piel con un perfume diferente.
ADAN: Lo adorabas?
BEATRIZ: Que otra cosa se hace con el hombre a quien una ama?
ADAN: Algunas mujeres hacen que sus amantes esperen y ofrecen el amor como si le hiciesen un favor.
BEATRIZ: Eso lo hacen tus prostitutas y mujeres perdidas, pero no las mujeres verdaderas.
ADAN: Entonces tú eres una mujer rara. Que pasa ahora? Otra vez has bajado la cabeza.
BEATRIZ: Tantas personas me han considerado una mujer rara!
ADAN: Pero no lo eres? Das la impresión de sentirte tan segura, tan confiada y aun tu silencio era tan confiado. Fíjate. Tienes piel suave, tus mejillas trasuntan orgullo, tu mirada es penetrante...Uno se da cuenta. Demasiado penetrante quizás, demasiado inteligente; pero triste también, y con tal cansancio, un tal cansancio agobiador y mundano. Salta a la vista.
BEATRIZ: No tienes miedo?
ADAN: Oh, si! Por supuesto. Deseo echar a correr y cambiarme de ropa. La que llevo es inadecuada y tiene forma fea. Las ropas que visto corresponden a un empleado del municipio o a un agente de empresa inmobiliaria, pero ahora tengo la sensación de que deberían pertenecer a un príncipe. Me siento torpe y descuidado. El cepillo con que te cepillé el cabello está hecho de nylon y me parece que debería ser hecho de cerda. Mis guantes son de resina y tengo la sensación que deberían ser de cuero. Y la forma en que tú sostienes la cabeza y me miras fugazmente, aun eso me induce a dudar de lo que siempre he pensado. Estoy asustado, intimidado, pero, que debo hacer? Eres una mujer rara.Mira, otra vez has doblado la cabeza. Es por algo que yo he dicho? Vas a volver al silencio? Es por algo que yo he dicho, no es verdad?
BEATRIZ: No debes...
ADAN: No debo que?
BEATRIZ: No debes...
ADAN: Que? Que? Que no debo yo?
BEATRIZ: Suavemente, Adán, suavemente. Debes concederme...
ADAN: ...el mundo entero. Todo el mundo te concederé. Como negártelo? Mira el sol, mira la mañana, es una mañana para ofrendas. El mundo entero te ofreceré con solo que lo pidas. Pídelo
nada más. Mi madre solía preguntarme: “Me amas?” y yo respondía: “Sí!” Y entonces ella decía: “Cuanto?” Y yo contestaba: “Seis peniques”. Ella decía entonces: “Nada mas que eso?” Y yo replicaba: “Dos chelines y seis peniques”. “Nada mas?” Preguntaba ella. Y mi respuesta era: “Todo el mundo, entonces. Te amo como todo el mundo, todo el mundo, todo el mundo, todo el mundo”. Que más puedo ofrecerte? Cuatro peniques para una taza de té? La crema de la leche? Te lo doy, además del sol y la mañana entera.
BEATRIZ: Me ahogarás en tus palabras.
ADAN: Eso es lo que siento, que puedo hacer? Te turbo?
BEATRIZ: No.
ADAN: Te abrumo?
BEATRIZ: No.
ADAN: Entonces da las gracias a Dios y deja de quejarte...Tal es lo que yo siento. Después de un invierno de silencio, eso es lo que siento. Deja de quejarte. LLEGA DE FUERA UN RUIDO TERRIBLE DE ALGO QUE CHOCA O SE ESTRELLA. ADAN VA A VER QUE HA SUCEDIDO. VUELVE PRONTO, TRAYENDO UN CAÑO DE DESAGÜE CAIDO Y ALGUNAS RAMAS ROTAS. Llega la primavera y es hora de reparar los destrozos del invierno. MIRA EL CUARTO, RECORRIENDOLO CON LA VISTA, Y AL VER UN PERCHERO ROTO, PONE ENCIMA EL CAÑO Y DENTRO DE ESTE LAS RAMAS. AHORA EN LA HABITACION HAY UN “ARBOL”, Y CUANDO LAS PAREDES, DESPUES DE ESTO, SE DESPLAZAN HACIA LOS COSTADOS, SE CONVIERTE EN ARBOL DE UN PAISAJE CAMPESTRE. Te sientes a gusto?
BEATRIZ: Tu orden es mi deseo.
ADAN: Ya veo. Así debe ser, no es verdad?Siempre una mujer que ofrece obediencia provoca sospechas en mí. Sin embargo, me arriesgaré, volveré a arriesgarme. Quieres que haga el pedido? Lo haré. Ante todo: Comida. Prepara comida. Sabes cocinar?
BEATRIZ: Puedo hacer la prueba. VA A LA COCINA Y LE ENSEÑA EL INTERIOR. Servirá esto?
ADAN: Huele a plato italiano. Que es? Sabes cocinar.
BEATRIZ: Que razón hay para que supongas que no sé, y que no sea capaz de llevar una casa? Tomas mi silencio por falta de capacidad.
ADAN: Me engañas. No quiero engaños. Para obediencia y falsas modestias...no tenemos tiempo.
BEATRIZ: Vamos! Si yo tengo falsa modestia, tú tienes falsa inocencia.
ADAN: Aaaaah!
BEATRIZ: Te ha dolido?
ADAN: Si. Querrías que me doliese?
BEATRIZ: Perdóname. Son antiguos reflejos.
ADAN: pero fue tan súbito, tan rápido.
BEATRIZ: He perfeccionado el hábito. Perdóname.
ADAN: Me pones en guardia.
BEATRIZ: Por favor, no estés en guardia.
ADAN SE APLACA Y PONE LA MESA CON MUCHO FLOREO. EXTRAIDOS DEL APARADOR, SALEN A RELUCIR UN ESPLENDIDO MANTEL BLANCO, CUCHILLERIA Y VAJILLA.
ADAN: Estoy famélico. Sería capaz de comer un centenar de carneros y beber un centenar de vasos grandes de cerveza. Sabes cuantas piedras saqué del césped de ese jardín esta mañana?
BEATRIZ: Cuantas?
ADAN: Adivínalo.
BEATRIZ: Como puedo adivinarlo?
ADAN: Adivínalo, dí una cantidad.
BEATRIZ: No me gustan los juegos, Adán.
ADAN: Si...practica juegos. Por que no? Es que nunca el pesimismo pierde su atractivo para ti?
Prefieres la morbosidad? Juega, yo estoy cansado de ser morboso. Juega. Deja que se vaya el frío.
BEATRIZ: El frío?
ADAN: Frío, lo que sea...
BEATRIZ: Hielo.
ADAN: Hay alguna diferencia?
BEATRIZ: No conoces la diferencia? PAUSA.
ADAN: Sin embargo, a ver si adivinas.
BEATRIZ: Veinte?
ADAN: No.
BEATRIZ: Cincuenta?
ADAN: No.
BEATRIZ: Quinientos entonces?
ADAN: Mil ciento noventa y siete y media.
BEATRIZ: Y media?
ADAN: Había una piedrecita rajada, azul por efecto del frío. La volví a enterrar.
BEATRIZ: Lamentablemente, en la aldea no encontré muchos vinos entre los cuales elegir. Sólo éste.
ADAN: Deja de disculparte.
BEATRIZ: Y éstos, mira; había una pequeña tienda de antigüedades y los compré baratos.
ADAN: Servilleteros! Estamos poniendo casa! Son de plata?
BEATRIZ: Además, georgianos.
ADAN: Tú lo sabes?
BEATRIZ: Muy baratos, te lo aseguro. El pobre ignoraba lo que eran.
ADAN: Por consiguiente, has tenido que comprar servilletas.
BEATRIZ: Estás enojado?
ADAN: Enojado?
BEATRIZ: Por mis derroches?
ADAN: Deja de disculparte. Estamos instalando un hogar. Ropa blanca! Esto será un banquete real.
BEATRIZ: Y perdóname, pero también encontré este pullover. Me pareció que te quedaría bien. Te gusta? No te resulta presuntuoso? Sentiría que tú...
ADAN: Por favor, por favor. No soporto que trates de disculparte continuamente. Sabías que me quedaría bien.
BEATRIZ: No siempre estoy segura en cuanto a las personas; a todos no gustan las cosas que se les compran o se eligen para ellos.
ADAN: No todos aceptan que una elección ajena esté acertada. PAUSA. De que color pintaremos estas paredes?
BEATRIZ: Blancas.
ADAN: Y cual deberá ser el color de las cortinas?
BEATRIZ: Dorado.
ADAN: Y las fundas de los muebles?
BEATRIZ: dorado también.
ADAN: Te sientes tan segura! Con que rapidez contestas!
BEATRIZ: Es una virtud que no tiene importancia.
ADAN: Gracias. SE ACERCA PARA BESARLA. No, no te tocaré. No quieres sentarte?
CEREMONIOSAMENTE, ADAN CORRE UNA SILLA PARA ELLA, DESTAPA LA BOTELLA DE VINO Y SIRVE PARA AMBOS. LUEGO LLEVA SU SILLA AL OTRO EXTREMO DE LA MES LARGA.
ADAN: Por quien o por que deberemos brindar?
BEATRIZ: Tal vez debamos levantar los vasos y no tentar al destino.
ADAN: Sigues teniendo miedo?
BEATRIZ: Miedo? No tengo miedo ni soy valiente. No siento nada. Bebamos simplemente.
LEVANTAN EN ALTO LOS VASOS Y BEBEN LENTAMENTE, PERMANECIENDO INMOVILES DESPUES QUE LOS VASOS HAN SIDO VACIADOS. Sabes que me dijo una vez mi marido? Pues dijo: “Eres igual que una reina sin nación. Yo detesto las reinas sin naciones”. El no sentía nada y yo no sentí. Pasamos los últimos años viviendo en una fría mentira cortés.
ADAN: Pero tu amante?
BEATRIZ: Era líder de hombres.
ADAN: Era o tú deseabas que fuese?
BEATRIZ: Eso es precisamente lo que él hubiese preguntado.
ADAN: Entonces lo conozco, te conozco, y conozco todo lo que pasó entre ustedes dos. Ahora te has puesto trágica.
BEATRIZ: Ni trágica ni alegre. Me siento indiferente. BEATRIZ LLEVA SU VASO Y BEBE A SOLAS. PERMANECEN SENTADOS EN SILENCIO. LA INDIFERENCIA DE ELLA SE CONVIERTE EN IRA. Eso! Eso, más que cualquier otra cosa, es lo que yo no puedo perdonar. Me hacía sentir la indiferencia. Una mujer como yo, yo...indiferencia! Es cosa que no puedo soportar. Lo desprecio; desprecio al hombre que tiene la osadía de hacerme sentir su indiferencia, lo desprecio.
ADAN: Beatriz...!
BEATRIZ: De mi marido no esperé nada más, pero de él...
ADAN: No hablas CONMIGO, Beatriz.
BEATRIZ: De él...menospreciar la adoración que yo quise profesarle!
ADAN: No me hablas a MI.
BEATRIZ: No encontrará ninguna, ninguna que tanto le ofrezca.
ADAN: Beatriz!
BEATRIZ: Busque cuanto busque, y por mucho tiempo que lo haga, no encontrará. ADAN SE LEVANTA Y EMPIEZA A QUITAR LA MESA. Perdóname.
ADAN: He traído pintura; tenemos que pintar la casa.
BEATRIZ: Soy aburrida, no es verdad?
ADAN: De arriba a abajo. Tenemos que pintar la casa desde el techo al suelo si queremos vivir en ella juntos todo el año.
BEATRIZ: Eres tan bueno y yo soy tan aburrida! No quise causarte dolor.
ADAN: Daremos la bienvenida a la primavera con esas paredes blancas.
BEATRIZ: Yo no quiero causar más dolor a nadie. Perdóname.
ADAN: Daremos la bienvenida a la primavera con paredes blancas, y al verano, con cortinas doradas.
BEATRIZ: Recorreré las tiendas buscando cositas y retazos que trabajaré yo misma.
ADAN: Que más puedo hacer? No sé que otra cosa puedo hacer. Todo es confusión.
BEATRIZ: Te aseguro, te aseguro.
ADAN: Siento una necesidad desesperada de proporcionar un goce, de volver a provocar risa, de curar a alguien. No es evidente?
BEATRIZ: Yo necesito que me cures, eso no es evidente también? Estoy harta del sonido de mi propia voz. Necesito ser curada, he destruido un matrimonio y malogrado un amante...necesito ser curada.
ADAN: Tienes ojos preciosos, manos preciosas.
BEATRIZ: Vuelve a decírmelo.
ADAN: Tienes labios divinos.
BEATRIZ: Otra vez, otra vez.
ADAN: Cabello y cutis...
BEATRIZ: Dímelo, Adán, Dímelo, Adán.
ADAN: Los vientos ruidosos te transportan.
BEATRIZ: Cúrame.
ADAN: Los grandes dioses te reclaman.
BEATRIZ: Cúrame.
ADAN: Si yo...Me sentaré a tus pies y te protegeré contra todos los terrores. PAUSA LARGA.
BEATRIZ: Y, sin embargo, no sientes nada de esto, verdad?
ADAN: Nada de eso.
BEATRIZ: Cuanto valor necesitas para decir esas cosas!
ADAN: Es necesario que sea valiente?
BEATRIZ: Yo necesito que lo seas.
ADAN: Yo necesito serlo.
BEATRIZ: Ahora mírate. Tu cara es la que se desintegra.
ADAN: Supongo que yo, en realidad, no creo en los grandes dioses.
BEATRIZ: Crees, si. Veo que crees. Yo creo en ti.
ADAN: Pobre Beatriz! Necesitas creer que yo creo, no es verdad?
BEATRIZ: Si.
ADAN: Y supongo que yo necesito que se crea en mi. Oh, dioses! De que manera seguimos! Esto debe cesar...esto de alentarnos nuestras recíprocas miserias. A ver cuanto tiempo podemos mantenernos alejados de la morbosidad. Manejas pinceles?
BEATRIZ: Puedo hacer la prueba, mi señor.
ADAN: Yo soy tu señor?
BEATRIZ: Si.
ADAN: Tu señor verdaderamente, verdaderamente?
BEATRIZ: Verdaderamente, verdaderamente.
ADAN: Entonces toma este pincel. TRAE DE LA COCINA PINCELES Y UN BALDE DE LECHADA; ADEMAS, DOS DELANTALES BLANCOS. Ponte esto. SE VISTEN DE BLANCO, TOMAN UN PINCEL Y LUEGO SE VUELVEN, CADA UNO DE UN MODO DISTINTO, BUSCANDO LA PARED EN QUE EMPEZAR. Esta?
BEATRIZ: No, ésa.
ADAN: DESPUES DE UNA PEQUEÑA PAUSA. Esa, entonces. ATACAN LA PARED.
“Siendo yo un muchacho tímido y poca cosa,
y el menos festejado en la grey de la parroquia
(dijo suspirando el viejo ariete que moría por falta de mujeres),
receloso y en puntillas penetré en el bosque de grosellas,
la imprudente lechuza graznó delatora,
ruborizado pasaba junto al sitio en que mujeres corpulentas
jugaban a los bolos en el terreno a que acudía la gente común,
mas las noches de domingo en que funcionaba el sube y baja,
hacía el amor a cuantas mis perversos ojos codiciaban,
amándolas durante toda una luna y luego abandonándolas,
jóvenes hechas mujeres, con sus envolturas de hojas verdes,
entregadas a su dolor, en el bosque negro como el carbón.
Siendo un hombre borrascoso y medio...”
BEATRIZ: Recita.
ADAN: “Y la bestia negra de los bancos de coleópteros”.
BEATRIZ: Canta.
ADAN: “(Suspiró el viejo ariete, que se moría por falta de rameras)”
BEATRIZ: Que otra cosa haces?
ADAN: Bailo.
BEATRIZ: Y que más?
ADAN: Toco el piano, la trompeta y el arpa.
BEATRIZ: Y que más?
ADAN: Pinto, construyo represas y manejo naves espaciales.
BEATRIZ: Luego también estudiaste ingeniería?
ADAN: Y tejo tapices.
BEATRIZ: Grandes?
ADAN: Vastos e intrincados.
BEATRIZ: Llenos de fantasías?
ADAN: Si, pero, como lo sabías?
BEATRIZ: Es tanto lo que ya sé de ti!
ADAN: Y tú?
BEATRIZ: Yo? Ah! Ninguna de esas cosas. Los hombres se acercan a mi con sus ideas, los políticos con sus dudas y los poetas piden mi alabanza. Mi hogar se llena de personas que buscan consuelo porque saben que mi instinto acierta. Ignoro como, pero sé lo que está bien. Que mujer corresponde a cada hombre; la comida que se debe servir en una reunión; la fuerza de un argumento; el tamaño de un cuadro para una pared. Pero en cuanto a mi? Revoloteo entre un gran plan y el siguiente y no fijo mi mente en ningún lugar; y, sin embargo, sé que en mi dedo meñique tengo toda la energía, el buen gusto y el talento necesarios para modelar tantas cosas, Oh, Dios mío! Tantas cosas...
ADAN: Canta, es forzoso que sepas cantar.
BEATRIZ: Ni siquiera eso. Creo que podría, e incluso hacer que la voz raspase en mis oídos, de regreso, a través de un grabador. Como quiera que sea no logro al parecer formar las notas. Sale una especie de quejido, un gorgoteo, algo así como un jadeo en busca de aire.
ADAN: Eso me resulta triste. En realidad, podría hacerme llorar eso de que una voz logre tan sólo jadear en busca de aire cuando quiere cantar. No te creo. Todos cantan, nunca supe de nadie que no pudiese cantar. Pero si hasta debió ser el primer sonido del primer hombre.
BEATRIZ: No lo fue, sabes? El primer hombre emitió un largo quejido y echó a correr dando vueltas aterrado. Debe haber sido la impresión más dolorosa del mundo en aquel momento. Estaban su esposa y sus hijos...y él corrió, corrió un trecho largo, muy largo. Corrió.
ADAN: Te equivocas! No fue un quejido de terror, fue un grito de alegría, un gran salto en el aire. Sólo pareció que corría un trecho largo porque se perdió en medio de toda la emoción.
BEATRIZ: A TRAVES DE SU SONRISA. Eso no lo crees realmente, verdad, Adán?
ADAN: Si te enseño a cantar me creerás?
BEATRIZ: No es posible, sé que no lo es.
ADAN: Si doy a tu garganta una docena de notas me creerás?
BEATRIZ: Eres muy bondadoso, pero...
ADAN: Me creerás?
BEATRIZ: Yo...
ADAN: Me creerá? ELLA SE RESIGNA. ADAN TARAREA UNA ESCALA MELODICA. Prueba esto. DE LA GARGANTA DE BEATRIZ SALE UNA QUEJA ESPANTOSA.
BEATRIZ: Yo debo estar loca. Créeme, Adán. Me siento turbada.
ADAN: No escuchaste. Para haber producido un sonido así, quiere decir que no has escuchado.
BEATRIZ: Escuché, créemelo, te oí, pero no pude repetirlo. Te oí.
ADAN: Otra vez! Y VUELVE A TARAREAR LA MISMA ESCALA.
BEATRIZ: Por favor, no insistas.
ADAN: Otra vez. TARAREA. ELLA HACE LA PRUEBA, Y OTRA VEZ DE SU GARGANTA SALE UN EXTRAÑO SONIDO GUTURAL. Pero no estás escuchando...Todos cantan.
BEATRIZ: Lloraré; si sigues, lloraré.
ADAN: Es como no tener ojos o ser rengo. Que haces a los niños si no sabes cantarles una canción de cuna?Que sonido emites cuando hueles las primeras flores?
BEATRIZ: No puedo, no puedo; eso es lo que me sucede, que no puedo. Ningún sonido, no emito sonido alguno, tan sólo un quejido vago o el silencio. Destruí un matrimonio y malogré un amante. Ahora déjame a solas, maldición!, déjame a solas.
ADAN: Cállate entonces. Perdóname.
BEATRIZ: Pues bien, no puedo. No puedo cantar.
ADAN: Perdóname.
BEATRIZ: Nunca pude.
ADAN: calla.
BEATRIZ: Crees que no he hecho la prueba? He hecho la prueba una y otra vez, pero, sencillamente, no puedo.
ADAN: Perdón. Dios mío! No podemos tocar nada que no explote?
BEATRIZ: Nada. Tampoco hubo nada que él ni yo pudiésemos tocar y no explotase. Que luchas sostuvimos! Yo creí ver a Dios en él, pero luchamos. El niño de las alas. Solía sentarme a sus pies, literalmente hablando, acurrucada en el suelo, abrazándolo. “Levántate”, me decía, pues a él le daba mucha rabia, “levántate, no sigas arrodillada, ninguna mujer debe arrodillarse ante un hombre”. Jamás creyó merecer tanta devoción; lo turbaba.Y yo estaba muerta, era un pedazo de nada hasta que él me tocaba, me hablaba o me miraba. Aun su propia mirada era un abrazo. Yo le insistía en que me diese a conocer todos sus pensamientos, ansiosa por penetrar cuanto pasaba por su cerebro, celosa ante el temor de que pudiese pensar algo que no compartiera conmigo. A veces no pensaba nada y decía: “Vacío! Mi cerebro es un vacío, es forzoso que el silencio denote siempre pensamientos profundos, mujer tonta?” Yo le decía que no me importaba, mas no podía apartar mi vista de él. Su cara estaba hecha de amor, a pesar de sí mismo, y yo conocía todas las curvas y movimientos que hacían sus facciones; no sé por que reñíamos. Eso es mentira. Sabía perfectamente por que reñíamos. No podía soportar que sobre él cayese la sombra de otra persona. El sólo oírlo hablar con alguien por teléfono bastaba para que se me erizasen los cabellos en mi nuca. Como se atrevía a suponer que mi intelecto no fuese capaz de aliviar el dolor intolerable de su mundo estúpido? Sabes que hacía yo? Ah! Somos sin duda seres espantosos; me burlaba. Solía burlarme y denigrar a cualquiera que estuviese cerca y fuese querido por él: amigos, parientes, colegas. Hasta a sus hijos, niños amorosos, grandes, inocentes, hasta ellos; no podía soportar que le exigiesen algo. Cuando estaban desesperadamente enfermos, yo desechaba sus quejas como dolencias pueriles, y cuando lloraban porque el padre constantemente estaba fuera, los acusaba de maldad insidiosa. A ninguno perdonaba el látigo de mis desprecios. Pero era conductor de hombres y los conductores de hombres replican a la lucha con nueva lucha. Cada palabra se convertía en una espada, cada espada en una bomba gigantesca que destruía centros nerviosos, que destrozaba el corazón. Nos lanzábamos uno a otro cualquier cosa: verdades, mentiras, verdades a medias...Que más daba, con tal de que fuese ponzoñoso, con tal de que no nos diésemos paz? A veces él cedía por amor a mi, y cuando se suscitaba la lucha siguiente, yo lo acosaba recordándole su anterior rendición; y si no se rendía, decía en tono de acusación que tenía miedo de su esposa. Nada de paz, nada en absoluto, ni para él ni para mi. Es dificil la comunicación humana? No, para nosotros no lo era. Nos comunicábamos demasiado bien él y yo. Finalmente nos volvíamos locos, insanos, dementes. Y por que? Un amor tan desesperado, que luchábamos para que no fuese reconocido, asustados ante la posibilidad de revelarnos lo indefensos que estábamos. Eso no es locura? Debes aceptarlo como tal. Dado que sin amor no siento apetito ni deseo, no soy capaz de nada y no poseo la fuerza necesaria para perdonarme. Ya ves. Sigues queriendo enseñarme a cantar? Enséñame a amarme a mi misma, será mejor...y tal vez entonces cante. ADAN VUELVE AL CUADRO. BEATRIZ LO OBSERVA. Cuanta paciencia tienes! ELLA VUELVE TAMBIEN A LA PINTURA Y AMBOS CONTINUAN EN SILENCIO. POR LO BAJO, ADAN EMPIEZA A ENTONAR LA CANCION QUE LE CANTO EN INVIERNO. BEATRIZ LUCHA POR CANTAR JUNTO A EL. AMBOS SE ESFUERZAN DESESPERADAMENTE POR QUEBRAR LA TENSION. PRONTO TARAREAN JUNTOS. ELLA LIGERAMENTE DESENTONADA. ADAN MIRA HACIA EL PUBLICO. BEATRIZ MIRA A ADAN. CON LEVES MOVIMIENTOS EXPLORATORIOS, ELLA INTENTA TOCARLO CON SUS MANOS, PALPAR SU PIEL. LE DESNUDA EL PECHO. Cierra los ojos. ADAN LOS CIERRA Y AHORA ELLA SE DESABROCHA LA ROPA, DESNUDANDO EL PECHO Y, DULCEMENTE, ROZAN PECHO CONTRA PECHO. EL MOVIMIENTO DE ELLA ES TIERNO Y TIENE AIRE DE SACRIFICIO
UNA OFRENDA QUE LE HACE POR PRIMERA VEZ; ADAN ABRE LOS OJOS Y LA ACEPTA COMO TAL. LOS MOVIMIENTOS DE AMBOS SON LOS MINIMOS POSIBLES, Y, PRECISAMENTE POR ESTO, MAS SENSUALES.
ADAN: Mi piel respira. Fluye sangre nuevamente por mis venas. Mi piel respira.
BEATRIZ: Nada debe retenerse jamás. Yo creo en eso, oh, Adán! Creo en eso. Somos mezquinos, somos tan mezquinos; pero nada debe retenerse.
EL LA SOSTIENE A UNA CORTA DISTANCIA PARA PODER MIRARLE EL ROSTRO. ELLA APARTA LA CARA.
ADAN: Estás sonrojándote.
BEATRIZ: No me mires.
ADAN: Como una jovencita te sonrojas.
BEATRIZ: Por favor, sujétame tan solo, pero no me mires.
ADAN: Por que? Quiero mirarte. Levanta la cabeza, Beatriz, y mírame. No apartes tu vista, mírame. Mírame de frente. ELLA CAE DE RODILLAS Y ENTIERRA EN LAS EXTREMIDADES DE EL SU DESNUDEZ. Espera. ADAN LA DEJA ARRODILLADA, COMO ASIDA DE SI MISMA, Y VA HASTA UN CAJON, DEL CUAL EXTRAE UN SUDARIO DE TELA DORADA. SE LO ECHA SOBRE LOS HOMBROS Y LA LEVANTA, PONIENDOLA DE PIE. Así, amor mío. Hazte ropas de oro para el sol. Espléndidas ropas doradas, antes de que venga el verano. BEATRIZ SE MARCHA, ENVUELTA EN LA DESLUMBRANTE TELA AMARILLA. UNA VEZ QUE ELLA HA SALIDO, ADAN SE ACOMODA LA CAMISA Y REUNE LOS PINCELES Y LA PINTURA, LLAMANDOLA MIENTRAS ORDENA LAS COSAS. Para nosotros pintaremos un templo blanco. Me oyes? Un templo blanco! Te adoraré en él. Me oyes? Un templo blanco en que adorarte.
AHORA LA ESCENA CAMBIA AL TIEMPO EN QUE LAS PAREDES SALEN DEL LUGAR Y OTRAS NUEVAS ENTRAN CON CORTINAS DORADAS EN SUS VENTANAS; Y EL MOBILIARIO VIEJO SE CAMBIA POR OTRO NUEVO, EXACTAMENTE LOS MISMOS MUEBLES, PERO RECUBIERTOS CON EL MISMO MATERIAL DORADO. UNA VEZ HECHO ESTO, EL INSPECCIONA SU LABOR Y HACE MUTIS, SATISFECHO. HAN PASADO DIAS, Y HASTA SEMANAS.

Verano . Cuatro Estaciones

ENTRA BEATRIZ. ESTAMOS EN UNA MAÑANA NUEVA Y, BELLAMENTE VESTIDA CON UNA PRENDA AMARILLA DE LA MISMA TELA QUE LE VIMOS AL HACER EL MUTIS, SE ACERCA AL CUARTO, AL DIA Y AL SOL COMO SI LO HICIESE POR VEZ PRIMERA. ESTA ENAMORADA DEL CUARTO, DE LA MAÑANA Y DE SI MISMA. SE COLOCA FRENTE A UN ESPEJO Y SE DESPEREZA LARGA Y SENSUALMENTE; LUEGO, TURBADA, SE VUELVE Y SONRÍE PARA CONSIGO MISMA. EN ESTA ACTITUD CAMINA POR LA HABITACION, TOCANDO SUS DIVERSOS OBJETOS, ESTABLECIENDO CONTACTO CON LAS SUPERFICIES QUIZAS POR VEZ PRIMERA. ENTRA ADAN, QUIEN PERMANECE OBSERVANDOLA UNOS SEGUNDOS ANTES DE QUE ELLA SE VUELVA HACIA EL. SE ACERCAN UNO A OTRO, Y AHORA, NO POR VEZ PRIMERA, SINO RECORDANDO, ELLA PALPA LA FORMA DEL CUERPO DE ADAN. ADAN ESTA A PUNTO DE DECIR ALGO, PERO POR SEÑAS BEATRIZ LE PIDE QUE NO LO HAGA. NO QUIERE HABLAR, SOLAMENTE MIRARLO, Y ESTO LO HACE CON UNA ESPECIE DE INCREDULIDAD, COMO SI NO PUDIESE ADMITIR SU BUENA SUERTE. LO TOMA DE LA MANO Y LO LLEVA GENTILMENTE A DAR VUELTAS POR LA HABITACION, A FIN DE PODER MIRARLO BAJO DISTINTAS LUCES. EN DETERMINADOS MOMENTOS SE APARTA UN
TRECHO DE EL Y CAMINA AL AZAR UNA CIERTA DISTANCIA COMO SI SU PROXIMIDAD PUDIESE DAR LUGAR A QUE EL DESAPARECIESE. DE CUANDO EN CUANDO SE VUELVE HACIA EL Y LUEGO GIRA RAPIDAMENTE LA CARA Y EL CUERPO COMO HACIENDOSE LA ILUSION DE QUE SE HA MARCHADO, COMO INCITANDO AL DESTINO A LLEVARSELO. CUANDO SE ENCUENTRAN A ESA DISTANCIA, DE PRONTO LOS MUEBLES Y LAS PAREDES DEL CUARTO SE ALEJAN POR EL AIRE. ESTA PRESENTE EL “ARBOL”; EL SOL ES AMARILLO; SE ENCUENTRAN EN EL CAMPO. BEATRIZ, CUAL UNA JOVENCITA, SE EMBUTE EL VESTIDO EN LOS PANTALONES MIENTRAS ADAN SE AGACHA PARA TOCARSE LOS DEDOS DE LOS PIES Y ELLA, EMITIENDO UN GRAN GEMIDO, CORRE Y SALTA SOBRE LA ESPALDA DE EL. LUEGO EL SALTA POR ENCIMA DE ELLA. AHORA CAMINAN SIMPLEMENTE Y SIGUEN CAMINANDO, ASPIRANDO EL AIRE, TOCANDOSE LAS YEMAS DE LOS DEDOS, DESPEREZANDOSE UNO Y OTRO, SINTIENDO UNO Y OTRO LAS FORMAS DE SUS PROPIOS CUERPOS.
BEATRIZ: Vuelve a fluir sangre por mis venas. Mi piel respira.
PRONTO SE ECHAN EN EL SUELO, AL LADO DE UNA ORILLA, DEBAJO DE UN ARBOL, CERCA DE UNA NIARA.
ADAN: Mira ese pájaro, aquel que está allí, el que parece suspendido en el aire. Lo crees?
BEATRIZ: Si creo?
ADAN: Si crees en él.
BEATRIZ: En su existencia?
ADAN: No, no. No en su existencia; quiero decir que bueno, que lo mires. Cuesta creer que pueda sostenerse en el aire, con solo batir sus alas de ese modo, verdad? Puedes creerlo? Supongo que si.
BEATRIZ: Que es entonces lo que lo mantiene en el aire?
ADAN: Oh! No sé. Supongo que alguien desde el suelo sopla arriba; no se me ocurre ninguna otra razón. Como los aeroplanos, todo ese metal en el aire. Todo ese metal y todas esas personas, sostenidas en el aire, sin tener nada debajo.
BEATRIZ: Salvo aire.
ADAN: Salvo aire.
BEATRIZ: Alguien sopla desde la tierra, debajo.
ADAN: Y los barcos. Parece tonto, no es cierto? Esa masa de hierro y madera...
BEATRIZ: ...y gente...
ADAN: ...y gente, todos flotando...
BEATRIZ: ...sin nada debajo...
ADAN: ...salvo hombres ranas. Millares de hombres ranas. Nadan con un brazo y sostienen el barco con el otro.
BEATRIZ: Y nubes.
ADAN: Nubes?
BEATRIZ: Que hacen todo ese ruido, los truenos...por lo menos así dicen.
ADAN: Oh! Eso...nunca lo creí.
BEATRIZ: Quiero decir, que es una nube? Bruma! Nada!
ADAN: Y esas flores.
BEATRIZ: Que flores?
ADAN: Esas que están allí, con todos sus colores y formas...Conoces lo que se dice acerca de ellas, no?
BEATRIZ: Que?
ADAN: Que ellas...no querrás creerlo...vienen de una semilla diminuta no mayor que esto. Mira! Todos esos colores. No mayor que esto.
BEATRIZ: Eso trataron de contármelo en la escuela.
ADAN: Lo creíste?
BEATRIZ: Yo planté bosques una vez en una margen remota de las tierras altas, durante dos años, para que fuese aprovechable una extensión perdida. Mi padre estudiaba plantas y de él aprendí el drama de la observación del modo en que las cosas crecen. Y cuando dejé atrás mis días de universidad, fui a las montañas y vendí abetos moribundos y pinos averiados. Has oído hablar alguna vez de la SOLDANELLA o margarita Shasta? El LAURISTINUS blanco y la planta roja de hielo? Sabías que CONVALARIA MAJALIS es el nombre latín del lirio de los valles? “Piensa en la CONVALARIA MAJALIS, la forma en que crece, en que no se esfuerza, ni se retuerce; y sin embargo, yo te digo que ni aun el propio salmón, con toda su gloria, se engalana como una de ellas”. Hice creer cosas, Adán, en cierta época, hice que crecieran.
ADAN: Y ahora?
BEATRIZ: Ahora? Tengo un águila de oro por amante.
ADAN: Pero el sol le ha quemado las alas.
BEATRIZ: Nada quemará tus alas. Yo soy tu sol.
ADAN: Adonde volaré?
BEATRIZ: A cualquier lugar, con tal que me lleves contigo.
ADAN: Pero tú eres mi sol.
BEATRIZ: Cuando necesites que sea tu sol, seré tu sol. Cuando necesites vientos suaves, cubriré la tierra con mi aliento. Cuando necesites consuelo, te ofreceré mis pechos, mis brazos y mis labios. Todo cuanto pidas lo tendrás.
ADAN: Y a ti? Que deberé darte?
BEATRIZ: Todos los segundos. Todos los contactos, todos los pensamientos, todos los sentimientos. Todos los segundos deberás darme.
ADAN: Deberé? Tú lo exiges?
BEATRIZ: Me niegas el derecho a exigir?
ADAN: No te niego nada.
BEATRIZ:( PONIENDOSE EN PIE DE UN SALTO) TENGO UN AGUILA DE ORO POR AMANTE! UN AGUILA DE ORO! TENGO UN AGUILA DE ORO POR AMANTE! Estamos listos Adán? Estamos listos ahora? Vámonos. Pongámonos a prueba lejos de aquí. Antes de que venga el invierno, vámonos de esta casa. Ahora, ahora. Esta es la época más hermosa. Vámonos...
ADAN: Ahora?
BEATRIZ: Ahora, ahora! Si nos quedamos tentaremos al destino.
ADAN: Todavía no. Ten confianza en mí.
BEATRIZ: No ves lo que me ha ocurrido? Dios mío! Creo en todo. Por ti me gustaría volver a ser joven; me gustaría ser tímida, pura y virginal para ti. Vamos, Adán. Hemos extraído de este lugar, de este momento, lo hemos extraído, cuanto puede dar. Aquí no hay nada más. Vámonos.
ADAN: Confía en mí.
BEATRIZ: Que confíe en ti? Ah! En ti confío completamente. Podría desgarrarme por ti, podría volar por ti. Soy una flor, me ves, Adán? Mira como me abro. Obsérvame. Estoy floreciendo. Mírame, mírameeee.
BEATRIZ SE YERGUE MUY ALTA Y LENTAMENTE SE DESPEREZA EN DIRECCION AL SOL. EL MOVIMIENTO DE SU CUERPO HACE JUEGO CON LAS PALABRAS QUE DICE GRITANDO. DA LA CARA AL SOL. ADAN LA OBSERVA VOLVIENDOSE HACIA EL ASTRO Y DANDOLE A EL LA ESPALDA. SE VUELVE Y SE ALEJA DE ELLA. QUEDAN INMOVILES EN ESTA POSICION, COMO CONGELADOS. EL SOL SE PONE. VUELVEN LAS PAREDES Y LOS MUEBLES. PASAN DIAS, HASTA SEMANAS.
ADAN: Hay dos clases de amor y hay dos clases de mujeres. La mujer cuyo amor tienes en torno, manteniéndose a distancia por miedo a que el calor te queme; y de ese calor tú surges despacio, confiado, tan seguro como la simiente en su matriz. Y la mujer cuyo amor es un sol opresivo que quema el aire que te rodea al extremo que no te sea posible respirar, se sequen todas las gotas de humedad de tus labios y no puedas hablar. Esa mujer posee una pasión de la cual no hay parte alguna que se relacione con ningún hombre viviente ni que hombre viviente alguno pudiera compartir. Sabes una cosa? Al nacer, llevaba en mi interior una gran risa. Lo podrás creer? Una gran risa, como una bendición. Algunos la amaron, otros la odiaron. Era una especie de incitación, una prueba que medía el valor de la gente como seres humanos; y nunca pude entender en absoluto la desesperación de su amor ni la de su odio. Alguna vez estuviste con una mujer hermosa, una belleza realmente arrobadora, y viste o sentiste las ondas apasionadas de la adoración o del odio que ella concita, y advertiste la forma en que la gente que la rodea experimenta la necesidad irresistible de decir cosas astutas y desagradables para demostrar que no los intimida su belleza? Así sucedía con mi risa. Y ella, no tenía necesidad de compararse con nadie ni con nada porque estaba de tal modo dotada de su propio encanto, de su propia inteligencia...ella también empezó a medirse en base a esa risa. Y por que? Porque era mía, sabes? Yo había nacido con esa risa y ella no podía soportar el hecho de no haber sido concebida con ella, y por eso se midió contra mí y lanzó su desafío contra todo cuanto fuese mío. Encontró enemigos donde no los había y vio traición en todos los actos. Interrumpió todas las sonrisas y entró a sangre y fuego en todos los momentos de paz por nosotros edificados. Y cierta vez, en que yo le escribí desde un lecho de enfermo y la maldije, perdida mi paciencia, ella de pronto se calmó como si quisiese demostrar que en realidad me había concedido aquella risa y solo ella podía cuidarme y restablecer mi salud. Dijo: “Esa risa es nuestro hijo. Ahora, por fin, solo yo puedo cuidarla. Tú eres incapaz”. Pronto sus palabras carecieron de sentido. “Veo a Dios en ti”, solía decir, y luego volcaba su acrimonia en mi labor. Me daba las gracias por darle vida, y después afirmaba jactanciosa que yo era obra suya. Deliraba de gozo y lamentaba, aplaudía y destruía, amaba y devoraba. Loca, loca, loca, loca. Por que destruye una mujer su amor con tan desesperada actitud dominadora? Por que? No tenía razón para desesperarse: yo era suyo. Me pregunto por donde andará ahora. Vaya uno a saber! Presumo que estará contemplando las ruinas de su destrucción: atónita, sorprendida ante el vacío que la rodea luego de toda la violencia de aquellos días. Ofuscada por los trozos y fragmentos de vida que le han quedado. Debe estar diciendo: “Como ocurrió? Que hacía yo?” Sola, inenarrablemente sola. Dios mío, como merece su soledad! Nadie tiene derecho a despojar a un hombre de la risa ni a negar su belleza a una mujer. Merece su aflicción. Y, sin embargo, a pesar de lo que es, hay una parte de su ser que no la merece; yo siempre comprendí. A través de toda esa locura, y ese amor es una locura que tú conoces, una locura, pero a través de todo eso yo comprendí su necesidad de bramar dolida frente a una relación tan tortuosa. Y ella comprendía también. En momentos de paz comprendíamos los dos y nos consolábamos mutuamente. Pero luego se olvidaba, volvía a gritar y yo no podía perdonarle que sus gritos contuviesen tal dolor, que sus heridas no escupiesen sangre clara, sino un veneno y que esto siguiera, siguiera y siguiera implacablemente, destrozándonos a los dos. Dios mío! Como merece su soledad! Y yo? Yo revuelvo el mundo buscando trozos y fragmentos de pasiones viejas, entusiasmos del pasado y ecos de la antigua risa. Pero es en realidad una búsqueda endeble. Veo cosas que desean que ella las vea. Visito lugares que desean que ella esté conmigo. Concibo pensamientos que desean que ella los comparta, que claman pidiendo su alabanza. Todo eso lo hago desde los licores que bebo a los jardines que cultivo, desde los colores que adoro a los humores que conformo; todo, todo es el pálido reflejo de su vívida personalidad. No nos recuperamos nunca, verdad? Con ella la risa se convirtió en ayes de dolor; sin ella la risa desapareció. Nunca, en realidad, nos recuperamos.
CUANDO BEATRIZ SE VUELVE HACIA EL ES UNA NUEVA MUJER. LA PONZOÑA DE SUS PALABRAS HACE JUEGO A LA DUREZA DE SU MIRADA.
BEATRIZ: Tienes la osadía de decirme todo esto?
ADAN: Osadía? Yo confío en ti. Por que “osadía”?
BEATRIZ: No piensas nada que no esté dirigido contra mí.
ADAN: Beatriz!
BEATRIZ: Contra mi! Ni siquiera una sola cosa.
ADAN: Pero yo tengo confianza en ti. Te hago confidencias.
BEATRIZ: Y yo confié en ti. Te confié mi amor.
ADAN: No has entendido.
BEATRIZ: Tú, mi “águila dorada”
ADAN: No es posible que hayas escuchado.
BEATRIZ: Mi marido decía siempre que yo espero demasiado de la gente.
ADAN: Me he expuesto...No es posible que hayas escuchado.
BEATRIZ: Hacer que presencie semejante insensibilidad.
ADAN: Insensibilidad? A eso llamas insensibilidad?
BEATRIZ: Semejante crudeza!
ADAN: Querías mentiras apasionadas?
BEATRIZ: Mentiras apasionadas?
ADAN: Simulaciones sórdidas?
BEATRIZ: Simulaciones sórdidas? Eso fueron nuestros días? Tu canto, tus recitales poéticos, tus declaraciones desde las nubes? Simulaciones sórdidas?
ADAN: Son campos de batalla familiares, Beatriz; no insistamos.
BEATRIZ: Por que no? Tienes miedo de lo que pueda decirse? Mi héroe valiente, mandado por los dioses para protegerme!
ADAN: seamos prudentes, reconozcamos el anuncio. Estamos cansados, no sigamos en estos campos de batalla conocidos.
ADAN RETROCEDE, ALEJANDOSE DE ELLA Y TOMANDO UN CABALLETE Y TELA SOBRE LA CUAL EMPIEZA A PINTAR.
BEATRIZ: Conocido por nosotros dos.
ADAN: Por nosotros dos. Y, por lo tanto, debes entender. Sé generosa y comprensiva. Yo escuché tus lamentaciones; ahora sé buena, escucha mis temores. Mírate. Tiemblas de rabia, ni siquiera escuchas.
BEATRIZ: Oigo todas tus palabras.
ADAN: Oyes lo que quieres oír, comprendes lo que necesitas comprender.
BEATRIZ: Tú ves cosas que desean que ella las vea, concibes pensamientos que quieren que ella los comparta. Lucha conmigo.
ADAN: Tienes razón.
BEATRIZ: Lucha conmigo.
ADAN: He cometido un error.
BEATRIZ: Lucha conmigo.
ADAN: Fui insensible. Lo lamento. Ahora dejemos que este día pase.
BEATRIZ: Ah, no! No me despidas de esa manera. Tengo derecho a que me contestes. Te he dado mi amor, tengo derecho a ser consolada.
ADAN: Derechos? Derechos? Dios mío! Derechos!
BEATRIZ: Tienes miedo.
ADAN: Un árbol en crecimiento oculta el sol.
BEATRIZ: Yo levanté los brazos hacia el sol y tú sentiste miedo.
ADAN: Si, miedo. Repara en la forma en que lo has sabido.
BEATRIZ: Yo crezco y tú te aterras.
ADAN: Si, si, me aterro; y dejo de fingir toda esa inocencia.
BEATRIZ: Pobrecito!
ADAN: Cada vez que una mujer levanta los brazos hacia el sol en demanda del hombre que desea, se produce un enorme grito de batalla y la guerra se desata.
BEATRIZ: Eres una pobre cosa patética!
ADAN: Y yo trato de creer que no puede ser verdad, que no puede ser siempre verdad, pero lo es. Sigue y sigue.
BEATRIZ: En ti no hay lucha ni amor. PAUSA.
ADAN: Que no hay amor en mi? Tú lo crees? Yo no lucharé contigo, Beatriz; no soy patético ni
tengo miedo, tan solo estoy cansado. PAUSA LARGA.
BEATRIZ: Por que pintas? Siendo profesor de palabras, por que borroneas telas? No lo haces muy bien.
ADAN: Tu desprecio es demasiado rebuscado para mi.
BEATRIZ: No es desprecio, lo que pasa es que no sabes pintar. Que falta te hacen esos hobbies? No te adoran bastante tus alumnos? No eres la gran autoridad en poetas románticos? A que responde esta necesidad de pasatiempos para fines de semana?
ADAN: Estoy cansado, Beatriz, cansado y enfermo.
BEATRIZ: Enfermo?
ADAN: Siento como si mi cuerpo quisiera desmenuzarse.
BEATRIZ: Psicosomático. Yo te veo completamente sano. No puedes esquivarme refugiándote en la enfermedad.
ADAN: Como sería posible que yo, que yo vuelva a cometer el mismo error?
BEATRIZ: Pobre Adán!
ADAN: No dices “pobre Beatriz”?
BEATRIZ: Por que había de decirlo?
ADAN: Si, tienes razón. Por que habías de decirlo?
AHORA NO SE MIRAN DE FRENTE. SIGUE UN LARGO SILENCIO.
BEATRIZ: Adán! Tengo frío.
ADAN: Las hojas caen, sopla un viento fuerte.
BEATRIZ: Necesito algo que me dé calor. SILENCIO. No se te ocurre ahora ninguna sugestión? Tu dama siente frío. Ya no hay un guardián que la atienda? SILENCIO. Y tu silencio es aún más frío. Adán, tu pobre dama siente frío.
ADAN: Tengo esto.
DE UN CAJON SACA DOS PULLOVERES. UNO ES MARRON, EL OTRO ES DEL COLOR DE LA HERRUMBRE. EL PRIMERO LO VISTE EL Y PONE EL OTRO A BEATRIZ. AHORA ESTAN VESTIDOS EN LOS COLORES DEL OTOÑO: VERDE, ORO, MARRON Y HERRUMBRE.
BEATRIZ: Por que no me das calor?
ADAN NECESITA HACERLO, PERO SIENTE MIEDO Y FINALMENTE LA TOMA EN SUS BRAZOS. LA BESA; UN BESO MUY LARGO. CAMBIA LA LUZ. PASAN LOS DIAS Y HASTA LAS SEMANAS. DE PRONTO ADAN CAE EN LOS BRAZOS DE ELLA COMO SI ESTUVIESE INSENSIBLE.
BEATRIZ: Adán! Ahora te da por los juegos? Adán! En realidad esto es muy infantil y candoroso, pero yo soy una mujer madura y los juegos me irritan. ESPERA. Adán, no me enfades, por favor.LO BAJA AL SUELO Y SE ALEJA PARA PRESTAR ATENCION AL CUARTO. Sé que quieres alegrarme, Adán; pero me temo que algunos de tus juegos no estén bien para la edad que tenemos. Adán! Adán! AHORA ELLA SE ACERCA A EL Y LE HACE DARSE VUELTA. Dios mío! Como has empalidecido! ADAN! LUCHA POR LLEVARLO A UN DIVAN Y LE POSA UNA MANO EN LA FRENTE. Pero no se advertía ningún indicio. Que enfermedad has contraído, niño tonto? Nada se notaba. Toda esa fiebre...Dios mío, que fiebre! LE ECHA UNA MANTA ENCIMA Y LUEGO CORRE UNA MESITA Y UN SILLON AL LADO DE LA CAMA. DE UN APARADOR SACA UNA BOTELLA DE COÑAC Y ALGUNAS PILDORAS, PONIENDO ESTAS EN UN VASO. LUEGO ARRIMA EL VASO A LOS LABIOS DE ADAN. CUANDO EL HA BEBIDO ALGO, ELLA LO BESA. DURANTE LAS PALABRAS QUE SIGUEN, LA LUZ VUELVE A CAMBIAR Y DENOTA SEMANAS QUE ELLA PASA CUIDANDOLO. Te quiero tanto, tanto! Moriría por atenderte. ADAN SE MUEVE Y MURMURA ALGO. Estoy aquí, amor mío, estoy aquí. No hace falta que grites. Calla. Quédate quieto, estoy aquí, tócame. AHORA ELLA SE ECHA UNA MANTA A LOS HOMBROS, Y SE SIENTA AL LADO DE EL, ESPERANDO QUE SE RECUPERE. Como desearía poder cantar ahora! Tienes razón, es una especie de mutilación eso de
que tu voz no sea capaz de producir música. Sabes una cosa? En realidad yo no soy tan traicionera como parezco, tan fría ni tan falta de humor. También a veces se apodera de mí una fiebre y no sé lo que digo. Pero soy siempre sincera, por lo menos conmigo misma, y buena y en realidad...muy cuerda. Pero me siento herida, me hacen sonrojar las arrugas de mi piel, me avergüenzan mis miembros gastados, de segunda mano. De tercera mano para ser más precisa. De tercera mano, heridos y dañados, como un reloj que da la medianoche cuando solo son las seis, y que zumba y ronronea. Pero las agujas marcan siempre la hora exacta. Y si nos hubiésemos conocido antes de conocer a ninguna otra persona, las agujas habrían señalado la hora exacta y la hora exacta habría sonado clara y cristalina. Oh, si tú y yo nos hubiésemos conocido antes de sentir el contacto de otra persona! Tú, Adán, y yo...Que habríamos hecho juntos? Con fuego habríamos abierto por todo el mundo sendas de flores de olor dulce, habríamos escrutado todos sus rincones curiosos, provocado tormentas entre los muertos...Eso es lo que hubiésemos hecho. Sabes que me dijo una vez mi marido? “Eres como una reina sin nación. Y yo detesto las reinas sin nación”. Tenía razón. Una reina sin nación ni rey. Sin hogar y sin hombre que le rinda homenaje. Toda mi vida he buscado paz y majestad; he buscado un hombre que no tuviese miedo y fuese generoso; generoso y no mezquino. No soporto los hombrecitos menudos, apologéticos, tímidos; hombres que se burlan de sí mismos y se ríen de otros; que se deleitan en las caídas y a nada se atreven. Paz, majestad y gran coraje...Cuanto he anhelado esas cosas! En una niebla me abandonó una vez ese hombre, el hombre que yo llamaba Dios; en una larga niebla londinense me abandonó y tuve que volver a mi casa sola y a pie. Paz, majestad y gran coraje. Una vez atravesé corriendo una tormenta de lluvia y quedé parada en un andén de estación, empapada, llorando a mares, implorándole que me llevase, que me llevase, que me llevase consigo. El necesitaba llevarme, lo sé, pero no quiso demostrar su necesidad. Durante una tarde de lluvia yo corrí. A veces me llevaba consigo y caminábamos por las calles de pueblos extraños, descubriendo formas nuevas de las casas y aspirando aires nuevos. Paz, majestad y gran coraje...Jamás! No he encontrado ninguna de esas cosas. Tan amarga desilusión. Amarga. Amarga, amarga, amarga. Y de toda esa amargura crece la crueldad. No es posible entender la crueldad que crece. En mí no fue intencional. Ni siquiera una sola palabra cruel. El lo sabía y yo lo sabía, y los dos sabíamos que lo sabíamos, mas la crueldad seguía. Pero lamentar lo que se ha hecho y lo que está en el pasado no es manera de curar a un inválido, no es verdad? Yo debería estar formulando planes para el mañana, no te parece? Uno para cuando te levantes, para el día siguiente, para el mes siguiente y para todos esos largos años que viviremos juntos. Que haremos durante esos años, Adán? Eh? Todos esos grandes años largos del futuro? Nos dedicaremos a curar los dolores intolerables de este mundo tonto? Yo tengo mis planes, planes en que entran hijos, viajes y la decisión de atreverme a todas esas cosas a que tú no te atreviste antes. Tú tienes planes. Proyectaremos y calcularemos todos los momentos como organizadores de un gran baile en que todos los invitados vengan a rendir homenaje y a compartir la alegría de los dos espléndidos amantes. Y paz, por sobre todo...paz, confianza y majestad y todo ese gran coraje. Ponte bien, niño adorado, y ya verás. Es posible que mi voz no cante, pero canta mi amor. Cúrate. ADAN SE INCORPORA.
ADAN: Cuanto tiempo ha pasado?
BEATRIZ: Han pasado tres semanas.
ADAN: Y tú has estado a mi lado todo este tiempo?
BEATRIZ: Calla.
ADAN: Semanas? Has estado a mi lado todas esas semanas?
BEATRIZ: Si, pero no supongas que haya sido un esfuerzo porque no lo fue. Parece más heroico de lo que es; sufro insomnio, no me costó trabajo.
ADAN: Que extraña fiebre! Nunca había estado tan enfermo.
BEATRIZ: Fatiga, tensión, cosas en realidad muy comunes.
ADAN: Estás tratando de despojar al asunto de su dramaticidad? Me siento muy débil y triste...Disfruto con ello. Teniéndote a mi lado, hay ternura en todas partes de tu ser. Eres como una mujer que acabase de dar a luz...resplandeciente y un poco pagada de sí misma. Yo me siento cuidado y mimado; es agradable, me deleita. ADAN SE LEVANTA AHORA DE SU LECHO DE ENFERMO, CON LA MANTA EN LOS HOMBROS, Y VA A MIRAR POR LA VENTANA. Se acortan los días. Es posible oler que los días se acortan, no es verdad? VA A MIRAR LA TELA QUE ESTUVO PINTANDO. Por supuesto, tienes razón. Borroneo telas. Debería contentarme con las palabras, aun cuando sean palabras de otro.
BEATRIZ: “No desprecies al maestro, pues él te imparte un amor que es el más generoso de todos”.
ADAN: Si fueses siempre así de dulce y generosa!
BEATRIZ: No lo soy? No, no lo soy. Tal vez porque yo borroneo también. Acaso el que sepamos burlarnos de otros no se debe a la enorme pefección con que antes nos burlamos de nosotros mismos? borroneo, y por lo tanto reconozco al borroneador, al diletante. No me contradices? Que poca galantería!
ADAN: Tienes un cerebro original. Sabes lo que pienso. No necesitas de mí para ser adulada.
BEATRIZ: Que equivocado estás! Creyendo que la sinceridad es una insensatez, que equivocado estás! La mayoría de las mujeres necesitan el calor de las mentiras de los hombres. Crees que me satisface oírte decir que tengo un cerebro original? Yo ya lo sé. Pero son mis deficiencias, mis defectos los que necesitan atención. Vuelca en ellos tu posibilidad de estímulo. Tranquilízame, asegúrame que algún día haré que no me aburra, que no siempre despreciaré a los que acuden a mí en busca de consejos.
ADAN: Estuve enfermo? Siento un vacío tan grande en el estómago, me siento tan delgado. Y tú has seguido aquí a pesar del olor y la fealdad de todo eso? Hace ya mucho tiempo que nos conocemos, no es verdad?
AMBOS EN SUS SITIOS SEPARADOS DEJAN CAER LAS MANTAS DE LOS HOMBROS. PASAN LOS DIAS, HASTA LAS SEMANAS.
PREPARATIVOS PARA EL STRUDEL.
ADAN: Hace mucho tiempo que no lo hago. Dos cosas me dejó mi abuela en su testamento, una bolsa llena de monedas de cuartos de penique y la receta para hacer el strudel de manzana húngaro. BUSCA DELANTALES BLANCOS. Toma, tú también necesitas uno. El polvo vuela, te lo prevengo. SE RESTRIEGA LAS MANOS, COMO UN PIANISTA ANTES DE SU CONCIERTO, CON EXAGERADOS MOVIMIENTOS. Sabes una cosa? Mi hijo decía que el viento era negro.
BEATRIZ: Eso es deprimente.
ADAN: No, es positivo. Negro! Estaba seguro, no podía ser de ningún otro color. Negro! Y hasta sonreía como si yo me burlase de él haciéndole una pregunta cuya respuesta eran tan obvia.
BEATRIZ: De que color crees que es?
ADAN: Gris. El viento es gris. Y ahora, en cuanto al milagro.
BEATRIZ: El milagro! Hace tanto tiempo que espero este milagro!
ADAN: Es mágico. Te lo aseguro. Está todo preparado?
BEATRIZ: Tal como tú lo pediste. Manzanas cortadas, nueces limpias.
ADAN: Lo demás?
BEATRIZ: Uvas, azúcar, canela y aceite de oliva.
BEATRIZ SACA ESTOS ARTICULOS DEL APARADOR Y LOS TRAE. ADAN ESTA POR HACER STRUDEL DE MANZANA. EL PROCESO ES MUY DRAMATICO. LA PASTA HA ESTADO “DESCANSANDO” 20 MINUTOS. ADAN ESTA POR TRAERLA A LA COCINA. PERO ANTES PONE UN MANTEL SOBRE LA MESA, COMO EL ILUSIONISTA QUE CUBRE LA SUYA CON UN PAÑO. EL MAGO SE PREPARA! AHORA RETIRA LA PASTA DE LA COCINA; ESTA COLOCADA EN UNA FUENTE, TAPADA CON UN PAÑO QUE ENCIMA TIENE HARINA ESPOLVOREADA. LA PASTA REPOSA CUAL UN PAN REDONDO. ADAN LA LEVANTA DE LA FUENTE, CON ELEGANTES MOVIMIENTOS LA TIRA AL AIRE PARA DARLE VUELTA, AUNQUE DE TODOS MODOS HABRIA PODIDO SEPARARSELA PERFECTAMENTE SI EN LA FUENTE SE HUBIESE PUESTO HARINA, Y ESTA POR COLOCARLA EN EL CENTRO DE LA MESA.
ADAN: La harina! En la cocina, pronto; la llevé allí para espolvorear esta fuente. Por amor de Dios, pronto, que la pasta se está pasando.
BEATRIZ CORRE A BUSCAR LA HARINA Y VUELVE PARA ESPOLVOREAR, ROCIAR Y LLENAR CON ELLA EL MANTEL. ADAN PONE LA PASTA EN EL CENTRO DEL PAÑO, ALARGA LA MANO EN PROCURA DE UN RODILLO, ESPOLVOREA ESTE CON HARINA Y LO PASA RODANDO POR LA PASTA HASTA COMPLETAR LA PRIMERA ETAPA, EN QUE ESTA TIENE FORMA OVALADA.
ADAN: Te gusta? BEATRIZ SE ENCOGE DE HOMBROS. Eres una mujer dificil, Beatriz.
BEATRIZ: Dificil? Que corto de vista! Yo soy suave como esta pasta, y tengo un sabor algo mejor.
ADAN: Has hecho un chiste. Sin proponértelo, pero hiciste un chiste. Es la primera vez.
BEATRIZ: Tu pasta, atiende tu pasta.
ADAN: Dura. No te lo digo como alabanza. Mezquina.
BEATRIZ: Cuando hayas ganado una alabanza, te la prodigaré espléndidamente. La pasta!
ADAN: Aceite, aceite, caliente, de la cocina. ALARGA LA MANO COMO UN MEDICO QUE PIDE EL ESCALPELO, SIN APARTAR LA VISTA DE LA PASTA. ESCEPTICAMENTE, BEATRIZ SE ALEJA DESPACIO Y HACE MUTIS. Muévete mujer, Rápido! ADAN ESTA ENCANTADO Y DA VUELTAS EN TORNO A SU PASTA.
BEATRIZ: GRITA. “Rápido”!
PERO ELLA SE MUEVE CON MAS RAPIDEZ Y LE TRAE EL ACEITE A ADAN. ESTE VIERTE SOBRE LA PASTA LA CANTIDAD QUE CABRIA EN UN DEDAL Y LUEGO LO EXTIENDE SOBRE LA SUPERFICIE CON LA PALMA DE LA MANO.
ADAN: Ah! Quema. Ahora CONSIGO MISMO. Cerciórate de que cubra bien la superficie, haz de manera que se extienda suavemente y...espera. Siéntate ahí tranquila y...mira. MIRA CON AIRE TRIUNFAL A BEATRIZ, QUIEN VUELVE A ENCOGERSE DE HOMBROS. Dura, muy dura.
BEATRIZ: Encuentras deleite en cosas tan pequeñas como éstas.
ADAN: Cosas pequeñas? Cosas pequeñas? No has visto nada, nada todavía. El milagro empieza ahora. Y TIENE MUCHA RAZON; EL MILAGRO REALMENTE EMPIEZA AHORA, PUES ADAN COMIENZA A EXTENDER LA PASTA Y LO HACE AL ACOMPAÑAMIENTO DE PAYASADAS MUY GENTILES; PAYASADAS GENTILES, GENTILES, NO FRENETICAS. Estírate, alma mía, estírate,; no pierdas la humedad, no te endurezcas todavía, no pierdas la humedad. BEATRIZ SE LEVANTA IMPACIENTEMENTE Y VUELCA SU ATENCION EN LAS COSAS DEL CUARTO. Por que sigues vaciando ceniceros y limpiando el cuarto? Quédate quieta y obsérvame.
BEATRIZ: El polvo me hace daño.
ADAN: No puedes aguantar el desorden, verdad?
BEATRIZ: Si, puedo aguantar el desorden; lo único que no soporto son el polvo y las cosas feas.
ADAN: Eres tan exigente!
BEATRIZ: No. Ser exigente es cosa de pedantes. Yo no soy pedante, soy justa solamente.
EL LA TRAE DE VUELTA A LA SILLA PARA CONSEGUIR QUE ELLA MIRE ANTES DE VOLVERSE A SU TRABAJO.
ADAN: Un agujero! Maldición! Un agujero! Falta de practica. De todos modos, no es grande. Tengo que mantenerme alerta, tengo que corregirlo si se agranda.
BEATRIZ: Estoy segura que las payasadas y los gestos no son indispensables.
ADAN: Cruel. Eres cruel y dura. Toma, bebe un poco de leche, suavízate.
BEATRIZ: No soporto la leche. Es para mujeres que tiran jabalinas, yo prefiero limones.
ADAN: Agria. Agria y dura. Tus ojos deberían estar agrandándose, agrandándose más y más, deberías sentirte sorprendida de mi habilidad.
BEATRIZ: Confieso...que es fascinante.
ADAN: Que de mala gana lo dices! Maldición, otro agujero! Pequeño, por suerte es pequeño. Ah uh! Ah uh! ADAN HA LLEGADO AL PUNTO EN QUE PUEDE GOLPEAR LA PASTA COMO
LA SABANA DE UNA CAMA, PARA ENDEREZARLA. No es un espectáculo maravilloso?
BEATRIZ: Muy inteligente, si.
ADAN: Caramba! Estás irritada.
BEATRIZ: De veras?
ADAN: Por que estás irritada?
BEATRIZ: Mira, otro agujero. Presta atención a los agujeros.
ADAN: Por que estás irritada?
BEATRIZ: Perdóname, no puedo compartir tu milagro.
ADAN: Claro que puedes. Aprende, puedes aprender, no es verdad? Mañana harás uno. Sientes envidia, no?
BEATRIZ: Envidia!
ADAN: Ja, ja! Siente envidia. Estírate, belleza mía, estírate, estírate. Te conté lo que me pasó en mis días de estudiante? Lo de aquella vez en que casi incendio la cocina en que trabajaba? Volqué una canasta llena de papas fritas húmedas en grasa que estaba hirviendo. No te rías. Yo creía que las papas fritas húmedas enfriarían la grasa; nadie me había dicho que cuando pones agua en la grasa hirviente, ésta arde.
BEATRIZ: que pasó?
ADAN: Ardió. Yo me quedé inmóvil, mirando las llamas, hipnotizado. Los chefs y los encargados de la conservación corrieron de un lado a otro gritando y tratando de extinguir las llamas con una substancia pegajosa, pero yo seguía inmóvil, mirando. Por supuesto, la sorpresa me había paralizado y permanecí quieto y callado, y todos los demás me creyeron tranquilo. Terminé siendo un héroe. Bueno, ya está. Solo unos pocos agujeros. Ahora las manzanas. SIEMBRA DE RODAJAS DE MANZANA EL BORDE DE LA MESA. Canela. ESPOLVOREA CON CANELA. Nueces. COLOCA LAS NUECES. Uva. ESPARCE LOS GRANOS DE UVA. Azúcar. SE OCUPA DEL AZUCAR. Más canela. ADAN PONE OTRA CAPA DE CANELA, ESPOLVOREANDOLA. Ahora a recortar los bordes. TOMA UN CUCHILLO Y RECORTA LOS BORDES GRUESOS DE LA PASTA QUE CUELGAN EN TORNO DE LA MESA. A hacer el enrrollado ahora. ADAN TOMA DE AMBOS EXTREMOS EL MANTEL SOBRE EL CUAL ESTA LA PASTA Y CON SUAVIDAD HACE QUE ESTA SE ENRROLLE, METIENDO EL CONTENIDO DEL STRUDEL EN UN CAÑO LARGO. CUANDO HA TERMINADO ESTO, PONE APRESURADAMENTE MAS ACEITE DE OLIVA EN LA SUPERFICIE DEL LARGO STRUDEL, ESPOLVOREA CON MAS AZUCAR EL ACEITE, CORTA EL TOTAL EN TRES PEDAZOS, COLOCA LOS TRES PEDAZOS EN UNA FUENTE PARA EL HORNO Y, VELOZMENTE, INTRODUCE EN EL HORNO TODO ESTO CERRANDO LA PUERTA CON FUERZA Y CON AIRE TRIUNFAL. Dime ahora, por que estabas tan irritada?
BEATRIZ: Porque te veía tan absorto.
ADAN: Pero lo hice por ti. Para que mirases. Para que tú aprendieses, para que tú comieses.
BEATRIZ: Tal vez sea así como empezaste pero a la mitad del camino, yo...
ADAN: Que? A la mitad del camino tú...?
BEATRIZ: Me da vergüenza.
ADAN: Tú...?
BEATRIZ: Sentí miedo.
ADAN: Miedo?
BEATRIZ: Oh! No sigas, oh, no sigas. Si no puedes entender, no sigas.
ADAN: No puedes despecharme así tan fácilmente. Yo necesito entender.
BEATRIZ: No debería tener necesidad de explicártelo.
ADAN: Está bien, soy un tonto. Dímelo.
BEATRIZ: Tú quieres justamente que yo te lo diga, no es así?
ADAN: Si.
BEATRIZ: Entiendes, no es cierto?
ADAN: Si.
BEATRIZ: Es tu risa. No puedo soportar tu risa, no es natural. Ahuyenta a todo el mundo.
ADAN: Todo el mundo?
BEATRIZ: Bueno, a mi, entonces.
ADAN: Te sabe mal mi risa?
BEATRIZ: En todo momento. Todos los toques, todas las ideas, todos los sentimientos, todos los segundos debes dármelos a mi.
ADAN: Y entonces llegaría un momento en que huirías acobardada de todos los contactos, te burlarías de todas las ideas, y te ofenderías de todos los sentimientos.
BEATRIZ: Ese es el momento que tú temes?
ADAN: Si.
BEATRIZ: Me crees capaz de esa ofensa?
ADAN: Todas las mujeres.
BEATRIZ: Ya entiendo.
LA LIMPIEZA HA TERMINADO. SE SEPARAN. PASAN DIAS, HASTA SEMANAS.

OTOÑO. Las Cuatro Estaciones.Parte 4




SE DESPLAZAN LAS PAREDES Y LOS MUEBLES. ELLOS DOS PERMANECEN DE PIE, SOLOS UNO Y OTRO, MIRANDO EL CIELO. SOPLA VIENTO. LA LUZ CAMBIA Y DE LA PENUMBRA DEL CREPUSCULO SE PASA A LA NOCHE. ES UNA NOCHE BRILLANTE, DIAFANA Y FRESCA, LLENA DE ESTRELLAS.
BEATRIZ: En que estás pensando?
ADAN: Me creerías si te dijese que mi mente era un vacío?
BEATRIZ: Si tú lo dices. PAUSA. Lo es? PAUSA. Es que esas estrellas solo inspiran vacío? PAUSA. Por que no amaste a tu mujer?
ADAN: Por que tú no amaste a tú marido?
BEATRIZ: Por que? No hay razones. Un día miras sencillamente a otra persona y comprendes que no la amas. Sin odio, sin rabia...
ADAN: Tan solo el sentimiento de culpabilidad por ser incapaz de sentir lo que se espera y necesita que sientas.
BEATRIZ: Pero la culpabilidad requiere una razón, no es así, Adán?
ADAN: Y tú, por lo tanto, te pones a buscar razones; y descubres que todas las cosas que antes te irritaban solamente, nada más que eso, nada más que irritarte, las magníficas y conviertes en imponentes excusas del odio. Sabes una cosa? No se me ocurre nada que yo haya hecho y de la cual no me sintiese culpable o arrepentido. Cuando por primera vez amé a una muchacha, yo tenía doce años de edad. Era una chica de cara rosada y mejillas que se agrandaban al sonreír, y que se creía fea. No pude convencerla de que no lo era. Ahuecaba los labios y se protegía tras de unos grandes y sabios ojos redondos, como dando a entender que antes de que el amor llegase sabía que el amor era un sueño imposible. La cortejé durante cuatro años, hasta que finalmente hubo un momento en que se abandonó confiada en mis brazos; y en aquel momento, en aquel preciso instante, yo la traicioné. Ocurrió en un campo de un valle, cerca de uno de los bosques mas grandes que yo había visto. Fuimos todos los veranos durante cuatro años, apenas un grupo de amigos. Y en aquel último verano vino una chica que me miró de pronto y decidió...Cuales fueron sus palabras exactas? Me lo contó después...Desde el primer momento había decidido que “debía ser yo”. Debía ser yo! Que mujer en cierne era! Lengua como un látigo. Voluntad como la de una roca enorme; e inteligencia aguda cual la de un halcón asustado. Y yo estaba destinado a llevar eternamente en mí sus cicatrices. Porque mientras cortejé a mi novia de la niñez esta adulta en miniatura tejía su propia y sutil red con una precisión terrible, terrible. Y la última noche ella, mi novia de ojos desmesuradamente abiertos, y yo, por fin, al cabo de cuatro años, logramos no sé como, encontrar esa especie de cansancio que
nos dio la confianza de uno en los brazos del otro. Yo había ganado. La tuve allí echada, entre amigos y el olor de la lona húmeda; realmente no estaba en mis brazos, sino sobre mis brazos y yo creo que le besé una mejilla una vez, o tal vez dos veces, y nada más, y entonces cayó dormida. Y siguió recostada en mi brazo; otra manos se alargó buscándome y...yo la tomé. Estoy tirado aquí, bajo estas estrellas, y pienso en el campo y recuerdo aquel campo y sé, con la misma certeza con que sé que hay una nube sobre aquella luna, que aquel terrible acto de traición lo he pagado y ha estropeado mi única vida, la de una vez, con todos los actos y decisiones que he hecho y he tomado en el mundo. Eso es lo que estoy pensando. Sabes una cosa? Cierta vez un amigo y yo atravesamos corriendo tres campos y subimos a una montaña para contemplar la puesta del sol. Sin detenernos en todo el camino, imagínate...corrí como loco, para llegar a tiempo y ver el sol que se ponía en una colina de Cotswold. Que dificil es creer que alguna vez fuimos felices! PAUSA LARGA.
BEATRIZ: Callas ahora? Estás callado ahora? Pobre Adán, que bien conozco esa necesidad de guardar silencio! No quieres decirme que puedo hacer? No lo dirás siquiera en dos palabras, en una sola? Como por ejemplo, “tócame”, “bésame”, o “vete”? Pero yo no quiero irme. Quiero sobrellevar mi infortunio. De pronto deseo tomarte en los brazos y darte todo el consuelo. De pronto quiero protegerte. Que puedo hacer? No quieres darme una orden, como hacías antes? Mandarme. Soy tu amante, no sabes que me puedes usar como quieras? Ignoras que posees ese poder? Careces de la fuerza necesaria para usarme, no es verdad? Y que tampoco posees la voluntad necesaria, la más pequeña voluntad del mundo? Tal vez haya algún otro sitio adonde pueda llevarte. Tal vez debamos encontrar otra casa; la comarca está llena de casas abandonadas. No sería curioso? Podríamos pasar el resto de nuestras vidas yendo de casa en casa, redecorándolas todas ellas; en una yo te reviviría hasta consumir todas mis energías y en la siguiente me revivirías tú y así continuaríamos. Pero en realidad jamás nos recuperaremos, verdad? Realmente, no. Sabes que día es hoy? Casi me olvido. No lo recuerdas? Es el día de Guy Fawkes. Hemos comprado fuegos artificiales. Lo habías olvidado, no es cierto? Fuegos artificiales, Adán. MIRA EN TORNO, ANHELANDO ENCONTRAR ALGO QUE REANIME EL ESPIRITU DE ADAN. ADVIERTE EL “ARBOL”, CORRE HACIA EL Y LO TRAE AL CENTRO DE LA ESCENA. LUEGO QUITA LAS RAMAS Y LAS METE POR AGUJEROS DEL CAÑO DE DESAGÜE PARA FORMAR CON ELLOS LOS BRAZOS DE UN MUÑECO, UN GUY FAWKES. DEPRIMIDO, ADAN PUEDE APENAS REACCIONAR Y SE CONCRETA A PENETRAR EN LA CASA, PARA VOLVER DE ELLA CON SACO, ECHARPE Y SOMBRERO. AMBOS VISTEN AL “MUÑECO”. Lo armo?
ADAN: No. Yo lo armaré. Quédate ahí. Mira la luna o cuenta las estrellas, pero quédate ahí.
BEATRIZ MIRA COMO SE ALEJA DESALENTADO. YA NO HAY NADA MAS QUE PUEDAN HACER EL UNO POR EL OTRO. ELLA SE VUELVE HACIA EL MUÑECO, EN EL QUE AHORA VE UN ESPANTAPAJAROS.
BEATRIZ: Criaturas, cadáveres, espantapájaros...No podéis responder tampoco, verdad? Yo os puedo hablar, florecer por vosotros y desgarrarme, pero sería igual. La paja que tenéis dentro se quemaría, se quemaría y luego...nada. Cenizas muertas de nada, de nada, de nada. Paz majestad y gran coraje? Dios mío! Tú los conviertes en imágenes de paño insensible, no de arcilla, y nos das una pasión que se consume en el aire, en el aire de la noche fría.
EXPLOTÓ EL PRIMER COHETE. UN ESTAMPIDO DISTANTE, UN ECO SUAVE DE LUZ...COMO UNA BATALLA QUE SE AVECINA. VUELVE ADAN.
ADAN: Bum! Ya estallan. Como los fuegos artificiales, no es así? Bum! Ahí va el segundo. Fueron mis hijos. Bum! Lindos, no es verdad que lo son? Permite que te enseñe un retrato de uno de mis hijos. Sabes que a ninguna otra persona hasta ahora he enseñado un retrato de mis hijos? Lo creerías? No te sentirás turbada ante las fotografías, no es cierto? Ya está, fíjate en esa sonrisita. Fíjate en la forma en que dobla los brazos. Desafiantes! Ese es él. Obstinado y desafiante, dominador. Rey en un reino de niños y ese reino es todo trenes de juguete y problemas. ADAN IMITA LA POSE DEL NIÑO DEL RETRATO. LOS FUEGOS ARTIFICIALES SIGUEN EN DISTANTES ESTAMPIDOS INTERMITENTES Y REVERBEROS.
BEATRIZ: Si, se te parece. En que está pegado? En una tarjeta de Navidad? De tu hijo?
ADAN: Es una postal de Navidad de un niño.
BEATRIZ: En realidad envió una postal de Navidad que lleva el retrato de su hijo. Que mal gusto! Me avergüenzas.
ADAN: La mandé porque es una buena foto de un niño, no porque fuese hijo mío.
BEATRIZ: Como los politicos que procuran granjearse las simpatías del público. Tú tienes los hijos como bienes poseídos, verdad? Lo enseñaste a tu querida? Cada vez que le hacías el amor? Se lo enseñaste? Lo sacabas y suspirabas mirándolo, para que ella viese lo culpable que te sentías? Le hablabas de tu esposa en la cama? Decías lo buena que en realidad era ella? Hacías eso? Le contestaste a las demás queridas la historia de la muchacha del campo? La contaste? Si? LA CONTASTE?
ADAN: Te sientes poseída, no? Se mueve algo en tu interior que no puedes dominar? Puedes oírte? No te escuchas alguna vez? No te sientes jamás avergonzada? Lo mismo, siempre los mismos lamentos, lamentablemente siempre iguales. Toda mi vida he buscado una mujer que tuviese ese toque mágico. Cuyas palabras no saliesen arrastradas de esa decrépita caja de trucos de prestidigitador.
BEATRIZ: Una tarjeta de Navidad con el retrato de tu hijo!
ADAN: Ni siquiera has oído. No has oído ni una sola palabra. No puedes oír ni entender que no estás oyendo.
BEATRIZ: Creo que te entiendo ahora. Vuelve junto a tu mujer, a tu casa, ella te perdonará. Aquí no tienes nada más que hacer.
ADAN: Jamás osaste tener un hijo, verdad?
BEATRIZ: Ningún hombre dotado de sensibilidad hubiera dicho eso.
ADAN: Tú dictas las leyes sobre la marcha.
BEATRIZ: Mi “águila de oro”! Su hijo en una postal de Navidad!
ADAN: Que traicionera, ruda y destructora eres!
BEATRIZ: Insúltame todo lo que quieras. Soy indiferente a tus desprecios.
ADAN: No era amor lo que necesitabas? Era? No te creo capaz de amar. Eh? Capaz de amar? Eres capaz de verdadero amor?
BEATRIZ: Si.
ADAN: Realmente capaz?
BEATRIZ: Si, si.
ADAN: Eres?
BEATRIZ: Si, si. Amor. Verdadero amor. PUEDO...AMAR.
ADAN: Cuanto tienes que gritar para decirlo!
BEATRIZ: Puedo...amar. He...amado y mira lo que vuelve...el olor de la culpabilidad, el olor patético de la culpabilidad. Puedo...amar. Sin embargo, no a ti. Mírate. Rígido de terror, miedo, duro de miedo. Tenso a causa del miedo. Tenso. Tenso, tenso, tenso.
ADAN: Haces los sonidos. Sé que haces los sonidos y los gestos del amor. Pero los sentimientos? Nada de eso.
BEATRIZ: Querido mío, tú no eres el más indicado para hablar de sentimientos, sabes? No eres exactamente el más indicado, el hombre más fiel. Ah! Aquellas noches en el campo con...que era?...El olor de la lona húmeda.
ADAN: Nada, nada se te puede confiar.
BEATRIZ: No creas haberme confiado algo que yo no pudiera ver. O piensas que alguna vez me sentí transportada por tu pasión de muñeco de cera?
ADAN: Te di lo que para mí era precioso. Lo que necesitabas te di y era precioso para mí.
BEATRIZ: Tú? Nunca fuiste tan grande como para darme lo que yo necesitaba. Pero sobreviviré.
ADAN: Verdad que si? Justamente...
BEATRIZ: Tú no sobrevivirás. Ni ellos ni tú, porque yo tengo más coraje, y soy más apasionada que ustedes tres juntos. Sobreviviré.
ADAN: Oyéndote, pareces ella. Insistía tanto en su capacidad de supervivencia que la última vez
que fui a verla puso en el fonógrafo un disco de la quinta sinfonía de Beethoven.
BEATRIZ: Ja! Hasta el último momento eres cruel. No sientes nada.
ADAN: Tan grande ha sido mi sorpresa que nada siento.
BEATRIZ: Yo te lo previne. Te pedí que te fueras de aquí, no es verdad?
ADAN: Esa es la razón?
BEATRIZ: Yo te lo advertí. Ustedes no eran suficientemente grandes.
ADAN: Esa es la razón.
BEATRIZ: Ahora vete a tu casa.
ADAN: Yo no escapé contigo.
BEATRIZ: Tú no podrías conservar una querida. Deja ésta. Vete a tu casa.
ADAN: Te devoraba la impaciencia por llevar de vuelta los despojos.
BEATRIZ: BURLONA. Ves cosas que quieres que ella vea, revuelves en tu cerebro pensamientos que quieres que ella comparta. Vuélvete.
ADAN: Fallaste a dos hombres y ahora necesitas demostrar que la culpa no fué tuya.
BEATRIZ: A quien no se le puede confiar nada, a quien?
ADAN: Oh! Tú eres ahora la que adopta una actitud severa ante las traiciones, verdad?
BEATRIZ: Eres un pedacito de hombre. Como tienes la osadía de arrojarme de vuelta lo que yo te confié?
ADAN: Haces que aflore la suciedad que hay en mí.
BEATRIZ: Ve a tu casa a buscar tus consuelos.
ADAN: Me oprimes.
BEATRIZ: A tu mujer, a tu casa.
ADAN: Secas el aire que me rodea.
BEATRIZ: A tus mocosos sonrientes...ve, ve. ADAN LA ABOFETEA. Te atreves a levantarme las manos? Te atreves? ELLA LEVANTA SUS MANOS PARA ATAJARLO, PERO EL LA SUJETA.
ADAN: Nada te toca. Tú devoras, devoras, devoras, DEVORAS! LA SUELTA.
BEATRIZ: Te desprecio. Vuelve a tu casa. VUELVEN LAS PAREDES, Y LOS MUEBLES TAMBIEN. PASAN LOS DÍAS, HASTA LAS SEMANAS. ADAN ESTA AHORA, MIRANDO DE FRENTE AL ESPANTAPAJAROS. BEATRIZ SE ARRASTRA HASTA UN RINCON, RETRAYENDOSE UNA VEZ MAS EN LA ANGUSTIA Y LAS LAGRIMAS.
ADAN: Criaturas, cadáveres, espantapajaros...No me replicas, verdad? Confieso mis temores y te sumes en el silencio, un silencio tan tranquilizador. Me aceptarás tal como soy, no es así? Todos nos conocemos, verdad? A quien hace falta que se le diga algo? Oh, mi buen y viejo amigo! Lo único es que cuando yo te doy mi amor, tú no lo devuelves, y eso es lo terrible. Solo un ser humano puede devolverlo y el precio que pagas es la ventaja que ellos obtienen. Eso es lo terrible.
BEATRIZ: En ti vi a Dios.
ADAN: Yo vi en mí lo que tú necesitabas ver. BEATRIZ ESTA LLORANDO. Lloras por ti misma.
BEATRIZ: Lloro por ti.
ADAN: Por tu propia congoja.
BEATRIZ: Por ti, por ti. Lloro por ti.
ADAN: Yo no creo en ti ni en tu llanto.
BEATRIZ: No has podido ver que a sacudones te aparté del miedo?
ADAN: No pudiste ver que yo retrocedía del miedo?
BEATRIZ: No sé que decir.
ADAN: Sabes todo lo que dices, lo sabes demasiado bien, lo sabes todo.
BEATRIZ: Me expuse. Era necesario que te enseñe cosas tan sencillas? Soy vulnerable y estoy asustada.
ADAN: Asustada? Tú?
BEATRIZ: Ayúdame.
ADAN: No puedo.
BEATRIZ: Yo te doy la mano. Ayúdame.
ADAN: No puedo.
BEATRIZ: Hagamos las paces como niños. Hagamos alguna tontería. Trepa a un árbol conmigo. Mira la luna junto a mí. Como niños, hagamos las paces.
ADAN: Si yo pudiera! Que bien sabes tentarme! No es cierto? Como niños, hagamos las paces... Ojalá pudiese!
BEATRIZ: Como niños, Adán, un pacto como si fuésemos niños.
ADAN: Y, en otro momento, sería como si no hubiese existido ningún pacto, y tú escupirías, escupirías y volverías a escupir, y entonces pedirías que te consolase, nuevamente escupirías y yo sería lanzado desde la mano derecha de tu pasión a la mano izquierda de tu ponzoña y no puedo, no puedo, no puedo.
BEATRIZ: Ayúdame.
ADAN: No puedo.
BEATRIZ AHORA PROFIERE UN QUEJIDO ATERRADOR QUE EMPIEZA COMO UN GEMIDO DE DESESPERACION, PERO SUBE DE VOLUMEN Y SE CONVIERTE EN GRITO DE IRA, CASI COMO SI A MITAD DEL GEMIDO SE DIESE CUENTA DE QUE NO SURTIRA EFECTO Y SU SUPLICA SERA VANA. EL GRITO TERMINA BRUSCAMENTE. LOS DOS COMPRENDEN QUE HA TERMINADO EL AÑO. BEATRIZ SE DIRIGE A LA COMODA Y CON TODO ESMERO SACA LA ROPA PARA DOBLARLA Y TENERLA LISTA PARA HACER EL EQUIPAJE. SE CALMA ES FRIA.
BEATRIZ: Debes saber que entre nosotros no hubo realmente nada, no es así?
ADAN: No hubo?
BEATRIZ: Ni siquiera fuimos en realidad amigos verdaderos, no es así?
ADAN: No?
BEATRIZ: Mi marido me decía siempre que yo esperaba demasiado de la gente.
ADAN: Que más?
BEATRIZ: Que más queda por decirse? Nada ocurrió. Todo fue una ficción. Un sueño infantil. Yo misma me sorprendo de esos sueños pueriles. Nada, nada en absoluto, nada ha sucedido.
ADAN: Por supuesto que no. Fué una tontería, no es verdad? Siempre es tonto tratar de conocer a más de una persona. Conocer más de una persona es traicionarlas.
BEATRIZ: Por el contrario. Conocer a una sola persona es traicionar al mundo.
ADAN: Ah, si! Al mundo.
BEATRIZ: Nunca podrás ser una isla, sabes?
ADAN: Oh! Tú crees que cuando se cumpla el milenario habrá amantes que se hastíen de sus amigas tristes, o esposas que lloren al ver sus lechos vacíos? Aún cuando se edifique Jerusalén, los amigos se apartarán y las madres llorarán el envejecimiento de sus hijos. Quieres que sienta dolor por hijos que mueren de hambre? Yo siento dolor por ellos. Quieres que proteste contra las guerras que siguen en las montañas? Yo protesto. Pero el corazón tiene sus dolores privados. Debes permitir que el corazón tenga sus dolores privados. Ni siquiera todas las grandes causas buenas de este mundo pueden impedir que llore un amor que pasa. PAUSA LARGA. Beatriz, que es lo que más recuerdas de él?
BEATRIZ: Que recuerdo? Un largo paseo en coche hacia el campo otoñal, eso es lo que recuerdo. La sorpresa compartida al ver que los árboles y los campos podían arder con tales colores. El tremendo resplandor de los setos moribundos, las hojas quemadas, el descubrimiento de estas cosas. Recuerdo los complots contra la indiferencia, la facilidad con que penetrábamos nuestros mutuos pensamientos en nuestras luchas con el mundo, el lenguaje que nos inculcábamos. Recuerdo los largos paseos en las noches largas, la gratitud por la presencia de él, mi sensación de impotencia. Y recuerdo que cuando mi padre murió en un país lejano, yo no fui a su lado porque quería estar con EL. Y mi padre murió solo...Yo era su hija predilecta. Recuerdo estas cosas. Y tú? Cuéntame que cosas hermosas recuerdas de ella.
ADAN: Momentos de música, silencio y adoración. La atención de sus ojos. Recuerdo la devoción de sus miembros y el cuidado que ponía en cuanto hacía por mí, desde la manera tierna de atar el paquete de un regalo a la íntima preparación de una comida. Recuerdo mi crueldad y recuerdo la crueldad de ella. Estas cosas. Recuerdo que no tuvimos miedo de bailar aún cuando no sabíamos, de decir que ignorábamos cosas que debimos conocer o admitir cada pequeño pecado cometido por uno de nosotros contra el otro. Recuerdo que no teníamos miedo de reír histéricamente, de jugar con niños ni de envejecer. Recuerdo que no sentíamos temor. Recuerdo a mi padre moribundo, cuya cabeza sostenía yo en mis manos mientras decía llorando: “Sigue respirando, sigue respirando, vamos, no te des por vencido, José; no pares, José”. Y mi madre, a través de sus lágrimas, decía: “Crees que te escuchará?” Sonreía, y los dos sollozábamos y yo quería pasar continuamente mis manos sobre sus ojos, sus mejillas y su cabello. Recuerdo estas cosas. Porque momentos como esos me recuerdan que el tiempo pasa y el paso del tiempo me hace pensar en la tristeza, el derroche, el descuido y el sufrimiento. Y en el fondo de mi corazón sé que todos aquellos preciosos momentos de la juventud no volverán. Recuerdo esas cosas, y en tal virtud soy más bondadoso, me resulta más fácil perdonar y ser perdonado. Estas cosas, Beatriz, estas cosas son las que recuerdo y sé, tal como tú sabes, y por esa misma razón serás más buena.
BEATRIZ: Creo haber contraído una nueva enfermedad. Me siento fría.
ADAN: Fría?
BEATRIZ: Si, es frío, verdad? Debemos tratar de abrigaros? Aquellas hojas muertas que tú barriste esta mañana...Haré una fogata con ellas. ADAN HACE MUTIS RAPIDO Y VUELVE CON UNA GRAN CANTIDAD DE HOJAS EN LOS BRAZOS, LAS CUALES TIRA EN EL FUEGO.
BEATRIZ: No sé por que debo sentir tanto frío.
ADAN: Pronto sentirás calor. TRATA DE HACER QUE ARDAN LAS HOJAS. SOLO CHISPORROTEAN. Están húmedas.
BEATRIZ: Hojas de otoño. Muertas. Que esperabas? ADAN SOPLA INTENSAMENTE PARA AVIVAR EL FUEGO Y QUE HAGA LLAMA.
ADAN: Arded, maldición, arded! NO QUIEREN ENCENDERSE. ADAN OBSERVA EL HUMO ESCASO. BEATRIZ SE REPLIEGA, SE REPLIEGA, Y SE REPLIEGA METICULOSAMENTE...